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Este miércoles, se espera que en Diputados haya un quórum holgado para tratar el proyecto de Ficha Limpia, una iniciativa empujada desde hace años por el PRO y ahora levantada por el bloque libertario.
En contraste, para el peronismo el proyecto tiene el único objetivo de proscribir electoralmente a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Se trata de una iniciativa que puede rastrear antecedentes que van desde años atrás hasta hace tan sólo un par de meses, siempre con poca suerte para quienes son sus principales promotores.
En la última ocasión, un desencuentro hizo que faltaran unos pocos diputados para conseguir el número mágico de 129 y las acusaciones volaron de bancada en bancada. La mala racha podría terminarse en la reunión extraordinaria que se celebrará este miércoles en la que se tratará el proyecto del Poder Ejecutivo que consiguió dictámenes hace pocos días.
Al menos dos fuentes independientes coinciden en que el número de inicio estará bien por encima de los 129, incluso tal vez más cerca de los 140. Luego de superado ese primer escollo, bajarán al debate los diputados del peronismo kirchnerista que intentarán, probablemente sin suerte, rechazar la iniciativa.
Sin embargo, el dictamen de mayoría contó con un importante número de objeciones, de “firmas en disidencia” que obligarán a reuniones que comenzarán esta tarde y que se extenderán durante algunas horas. El riesgo es que, una vez aprobado el cuerpo general, se “caiga” durante la votación en particular.
Hay varios puntos que generan conflictos, uno es el “artículo Petri”, el cual propone que solo se tengan en cuenta condenas emitidas en años no electorales y que, para muchos diputados, “no tiene pies ni cabeza”.
En ese sentido, durante una reunión realizada en horas de la tarde entre los bloques dialoguistas, se acordó quitar esas condiciones que prescribían que la doble condena sólo sirve para la Ficha Limpia en caso de que sea firmada por un tribunal en año no electoral.
Además, otros bloques consideran que está mal redactado lo de “segunda instancia” dado que en el Código Penal y en el Procesal no existe tal cosa.
“Tienen que usar los términos jurídicos como ‘instancia superior'”, explicaron desde un bloque opositor. Además, entienden que “se tienen que redactar casi entero el artículo 1, ya que salió con muchísimas firmas en disidencia”.
Después de un largo debate en comisión tenemos dictamen de Ficha Limpia, de hecho tenemos varios dictámenes a favor de todos los bloques salvo el kichnerismo y la izquierda que como siempre se oponen a cualquier legislación anticorrupción. Un paso más. No bajamos los brazos.
— Silvia Lospennato (@slospennato) February 5, 2025
La última frustración
Fue el 28 de noviembre pasado, al filo del fin del período de Sesiones Ordinarias, cuando la oposición quiso darle media sanción al proyecto de Ficha Limpia. Se llegó a 128 legisladores sentados en sus bancas, uno menos del mínimo para iniciar la sesión.
Desde la Coalición Cívica, Juan Manuel López, y desde la UCR, Rodrigo De Loredo, denunciaron un acuerdo entre el oficialismo y el kirchnerismo que terminaron por dar por tierra con la sesión.
Con voz elevada, López apuntó contra el bloque de La Libertad Avanza por la ausencia de “4 o 5 personas”. Señaló que “el presidente (Javier Milei) dice lo que quiere, que quiere confrontar electoralmente con Cristina Fernández Kirchner”.
“El señor presidente, en su campaña permanente en una entrevista televisiva dijo que él le quería poner el último clavo al cajón de la señora Cristina Fernández de Kirchner. Él quiere que Cristina sea candidata a Diputada nacional para que el diputado Espert o la señora Karina Milei le compitan. Ese es el pacto que se acaba de consolidar hoy. La quieren de candidata, están dispuestos a perder la elección por una táctica de corto plazo que puede hacerle mal a la Argentina”, dijo.
La espina quedó clavada y la Casa Rosada respondió que enviaría un proyecto en unas extraordinarias que se convocarían en diciembre y que llegaron recién en enero. Ahora el oficialismo y un variopinto grupo de bloques aliados estarían a las puertas de conseguir la media sanción.
La suerte que corra en el Senado es algo que se podrá evaluar en algunos días. De conseguir la sanción definitiva, el Gobierno festejará con sus aliados de ocasión. De ser rechazada en la Cámara alta, hablará del “Principio de Revelación” del que tanto habla el Presidente Milei cuando sufre reveses legislativos.
Fuente El Cronista
