Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha propuesto este viernes en la Conferencia de Seguridad Múnich no tener en cuenta las inversiones militares a la hora del cumplimiento de las reglas fiscales de la Unión Europea, que ya incluían una cierta flexibilidad para la inversión en seguridad y defensa. Esas normas, reformadas a finales de 2023, establecen que los países deben tener un déficit fiscal inferior al 3% y un nivel de deuda pública que tienda al 60% del PIB. “Puedo anunciar que propondré activar la cláusula de escape para las inversiones en defensa”, ha asegurado Von der Leyen en una intervención en la que ha asegurado que se vive “un momento histórico”, haciendo referencia a los movimientos de la administración americana para entrar en negociaciones con Rusia respecto a la guerra ucraniana. “Una Ucrania fallida debilitaría a Europa, pero también a Estados Unidos”, ha recordado la presidenta de la Comisión Europea.
Los Estados miembros están sometidos a mucha presión por parte de Estados Unidos para cumplir con el llamado “compromiso de Gales” de 2014, por el cual los aliados de la OTAN se comprometían a aumentar su gasto en defensa hasta el 2%. Ahora, la nueva administración americana liderada por Donald Trump, está exigiendo aumentar ese objetivo. Sin embargo, muchos países europeos están inmersos en un proceso de consolidación fiscal que les deja poco espacio para estar costosas inversiones, que se han vuelto urgentes no solamente por las exigencias de Trump, sino por el empeoramiento de la situación de la seguridad europea tras la invasión rusa de Ucrania en 2022. Incluso con el apretado corsé fiscal de la Unión Europea, el aumento de gasto en defensa ya se está produciendo: entre 2021 y 2024 los países de la UE aumentaron su inversión en defensa cerca de un 30%.
“En anteriores crisis extraordinarias, fíjense en lo que hicimos. Dimos a los Estados miembros un margen fiscal adicional activando la cláusula general de escape. En términos sencillos, permitimos a los Estados miembros aumentar sustancialmente las inversiones públicas vinculadas a la crisis. Creo que ahora nos encontramos en otro periodo de crisis que justifica un planteamiento similar. Por eso puedo anunciar que propondré activar la cláusula de escape para las inversiones en defensa”, ha explicado la alemana, haciendo una vinculación entre cómo la Unión Europea afrontó el coronavirus y la actual crisis de seguridad.
La UE promete responder “firme e inmediatamente” a los aranceles recíprocos de Trump
Nacho Alarcón. Bruselas
El lunes 3 de febrero, los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión se reunieron en Bruselas para discutir sobre el futuro de la seguridad y la defensa del club comunitario. Von der Leyen prometió que estudiaría la flexibilidad que permiten las reglas fiscales comunitarias para permitir a las capitales aumentar la inversión en defensa, pero no dio detalles. Esta es la primera vez que la alemana explica cómo pretende potenciar dicha inversión. Además, la presidenta de la Comisión Europea ha asegurado que hará falta un “enfoque europeo a la hora de establecer las prioridades de inversión” y que habrá dinero para proyectos de defensa de interés común europeo. Algunos Estados miembros solicitan que para estos proyectos la Unión Europea emita deuda conjunta como hizo durante el coronavirus para financiar el Fondo de Recuperación.
La paz en Ucrania
La presidenta de la Comisión Europea ha hablado por primera vez de manera amplia sobre la cuestión de la guerra en Ucrania después de que Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, haya hablado con Vladímir Putin, presidente ruso, y hayan acordado trabajar en un acuerdo de paz “inmediatamente”. Muchas capitales han seguido con preocupación como Pete Hegseth, secretario de Defensa de Estados Unidos, ofrecía cesiones públicas a Rusia incluso antes de que comiencen las negociaciones, como descartar que Ucrania ingrese en la OTAN, que pueda recuperar sus fronteras previas a 2014, o que las fuerzas europeas de paz que puedan desplegarse en territorio ucraniano tras un acuerdo no vayan a estar cubiertas por la cláusula de defensa colectiva de la Alianza Atlántica.
Múnich vuelve a marcar el futuro de una Europa que ya ha empezado a construir búnkeres
Mónica Redondo. Berlín
Sin referirse directamente a Hegseth ni a Trump, pero sí a los comentarios hechos por “altos funcionarios estadounidenses” Von der Leyen ha asegurado que “los autoritarios de este mundo observan atentamente si hay impunidad si invades a tu vecino y violas las fronteras internacionales. O si existen verdaderas medidas disuasorias”. “Nos observan a nosotros, a las acciones que decidimos emprender. Por eso es tan importante que lo hagamos bien”, ha explicado la alemana en su discurso.
Pero la alemana ha dado la vuelta a las palabras de Trump y Hegseth, asegurando que, en realidad, europeos y americanos pueden estar “de acuerdo” en algunos elementos del “fondo de los comentarios”, superando “la indignación y la protesta”. “Tanto la UE como Estados Unidos quieren el fin del derramamiento de sangre. Queremos una paz justa y duradera, que conduzca a una Ucrania soberana y próspera. Y Ucrania debe recibir sólidas garantías de seguridad”, ha explicado Von der Leyen. La realidad es que Hegseth, aclarando que cualquier tropa europea desplegada en Ucrania no estaría cubierta por el artículo 5 de la OTAN ha debilitado considerablemente esas garantías de seguridad.
Además, Von der Leyen ha defendido el rol de la Unión Europea en estos últimos años, subrayando la asistencia militar dada y los distintos paquetes de sanciones adoptados contra el Kremlin. “Hemos roto un tabú tras otro y acabado con nuestra dependencia del gas ruso, haciéndonos más resistentes de forma permanente. Y estamos a punto de hacer más. Estamos trabajando con Ucrania en su adhesión a la UE. Porque Ucrania forma parte de nuestra familia europea. Y ahí es donde está su futuro”, ha explicado la alemana.
Fuente El Confidencial