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Aunque el lunes de la pasada semana la abstención del PP y Vox en un pleno extraordinario del Ayuntamiento de Cuenca impidió nombrar hijos adoptivos o predilectos a los conquenses deportados a los campos nazis, este miércoles finalmente esta propuesta del equipo de gobierno ha salido finalmente adelante tras el informe favorable realizado por la Secretaría General del consistorio.
La iniciativa solicitaba la concesión a estas víctimas del título de hijos predilectos o adoptivos, según sí hubieran nacido o no dentro del municipio de Cuenca, a los vecinos de la provincia que pasaron por los campos nazis entre 1940 y 1945, documentados por un trabajo liderado por Ángel Luis López Villaverde y Herminio Lebrero .La votación en el pleno de la pasada semana tuvo trece apoyos y doce abstenciones, por lo que inicialmente fue rechazada al ser necesaria una mayoría de tres quintas partes. En concreto, la propuesta obtuvo 13 votos a favor de dicho nombramiento, correspondientes a los grupos PSOE, Cuenca nos Une y Cuenca en Marcha, y 12 abstenciones por parte de los concejales del Partido Popular y de Vox.
El secretario general del Ayuntamiento de Cuenca recordó ya entonces que, con los reglamentos vigentes, debería valer como la mayoría simple. Sin embargo, el alcalde conquense, Darío Dolz , optó por pedirle un informe jurídico que dictaminase qué mayoría era necesaria, el cual ahora valida la votación favorable
La noticia ha sido celebrada por la concejala de Cultura, María Ángeles Martínez , quien ha mostrado su satisfacción por el hecho de que «pueda hacerse efectivo el reconocimiento de la ciudad al casi centenar de conquenses documentados que fueron deportados a estos campos, muriendo allí 60 de ellos, y en cualquier caso sometidos todos ellos al terror causado por los nazis en estos lugares, pese al intento de los concejales del Partido Popular y de Vox de escudarse en aspectos formales para blanquear esta terrible realidad».El concejal de Vox Rafael Rodríguez argumentaba la pasada semana la abstención de su partido porque, según el reglamento, «esos títulos están pensados para personas que han hecho algo en beneficio de Cuenca y para reconocimientos individuales y no grupales, como es este caso».
Desde su punto de vista, el monolito que se erigió en su honor en el Paseo del Huécar es suficiente homenaje.El concejal del Grupo Popular Álvaro Barambio explicó igualmente que, tras visualizar el pleno de 2019, observaron que en aquella moción no se aprobó la propuesta de nombramiento porque no se ajustaba al reglamento de honores, tal y como reconoció en el debate la concejal del Grupo Socialista Saray Portillo.Por su parte, Cuenca en Marcha, a través de su concejal Pablo García , celebra que, cinco años después de que se debatiera su moción que proponía este nombramiento, haya llegado esta votación que considera «un acto de justicia con esas personas». «En esta cuestión no hay medias tintas: o se está con las víctimas o con los verdugos», concluyó.
Fuente ABC
