
El gobernador Alfredo Cornejo está preocupado. No tiene una buena imagen de parte del electorado en general, aunque no sufrió muchos cambios. Se mantiene estable. ¿Pero alcanzará ello para hacer una buena elección de cara a las legislativas de este año?
Sin grandes anuncios políticos ni fuertes cambios en materia administrativa, nada hace pensar por ahora que pueda repuntar el apoyo que necesita para mantener buenos números en la Legislatura.
Su cercanía al gobierno de Javier Milei también le está causando estragos. El presidente se encuentra cada vez más golpeado por los escándalos que agitan al interior del Gobierno nacional.
Mendoza fue la segunda provincia que más votos le aportó a Milei en las presidenciales del 2023, pero la imagen del presidente viene cayendo en picada, de hecho de más del 60% de aval que consiguió en la provincia hoy el apoyo cayó hasta poco más del 50%… y continúa descendiendo.
No por nada, según la última encuesta publicada por la firma CB Consultora, Cornejo quedó en el puesto 18 del ranking de imagen de los gobernadores, con una valoración positiva del 47,6% y una negativa de 48,4%.
La estrategia principal del gobernador, que era mostrarse cercano a Milei, algo que sí pudo conseguir la vicegobernadora Hebe Casado, hoy parece haberlo estancado.
No hay una estrategia tácita y lo que se viene de ahora en más, salvo que haya un fuerte cambio en materia política y de anuncios, es la perdida de representatividad del radicalismo mendocino en la provincia, dándole lugar a otras fuerzas que se disputan el poder real de Mendoza.
Sin embargo se aferra a la idea original, y eso quedó demostrado luego de que el ex gobernador, alfil central de Cornejo, Rodolfo Suarez, se alineara a la idea de que la dieta de los Senadores nacionales debería seguir estando congelada. Ese es un guiño al centro del Gobierno de Milei.
La pregunta, simple aunque reveladora frente al presente escenario político, es si a Cornejo le va a alcanzar para seguir manteniendo su influencia en la Legislatura provincial.
Por ahora parece haber lanzado una improvisada campaña que busca demostrar que está del lado de los mendocinos. Una suerte de remake del “soy un tipo común” que manifestaba Alberto Fernández en 2019.
Lo único que le queda ahora, hasta poder encauzar una campaña más fuerte, es resaltar los logros de su gestión, tales los casos del “Plan Estratégicos de Salud” o el refuerzo en la seguridad del Sistema Penitenciario provincial.
Algo quizá un poco más novedoso es que bajó el nivel de conflictividad. Se muestra mucho más calmo que en el pasado y resalta las virtudes de su administración sin necesariamente señalar las falencias del resto de los partidos provinciales.
Por ahí va la estrategia de la nueva campaña del radicalismo provincial y de Cornejo en particular: mantenerse tranquilo, celebrando logros y mostrarse como un ciudadano a la orden del resto; todo ello de la mano de una cercanía con el presidente Milei que parece ignorarlo sistemáticamente.
Este artículo se publicó primero en Mendoza Today.
Fuente Mendoza Today