
Las elecciones legislativas de Santa Fe, celebradas el pasado domingo, dejaron un sinfín de análisis en todo el arco político, y hasta se leyó como una derrota para el Gobierno Nacional, ya que La Libertad Avanza en la provincia quedó en cuarto lugar, consagrando como ganador en la Legislatura al actual gobernador Maximiliano Pullaro.
Sin embargo, es un error recurrente. Nacionalizar las elecciones provinciales es una grave equivocación, porque los electores en la provincia pueden elegir representantes de distintos partidos en las diversas elecciones.
Esto último viene a cuento de la inmensa cantidad de personas que aseguraron que el Gobierno Nacional estaba “terminado” sobre la base del resultado de una elección provincial. Nada más lejos de la realidad.
Mendoza, de hecho, es la muestra más cabal de ello. Donde a nivel provincial se elige al radicalismo, tanto para la gobernación como para la conformación de ambas cámaras en la Legislatura y, sin embargo, después de Córdoba, fue la que más votos le aportó a Milei durante las elecciones del 2023.
Solo es necesario hacer un poco de memoria para argumentar dicho concepto. En las últimas elecciones generales, Alfredo Cornejo ganó la elección provincial con casi el 40% de los votos, dejando en segundo lugar a La Unión Mendocina, aliada a La Libertad Avanza a nivel provincial.
De hecho, la coalición estaba formada por diversos partidos, entre ellos el Demócrata, que hoy tiene a dos diputados nacionales por La Libertad Avanza: María Mercedes Llano y Facundo Correa Llano.
El creador del espacio, Omar De Marchi, fue beneficiado tras la derrota electoral en la provincia por el gobierno de Javier Milei al ser puesto al frente de la Secretaria de Relaciones Parlamentarias e Institucionales, para luego ser designado como vicepresidente de Aerolíneas Argentinas.
Sin embargo, el apoyo a nivel provincial fue a la Unión Cívica Radical, a pesar de que a nivel nacional fue a parar a La Libertad Avanza, ya que el 56% de los votantes optó por la propuesta de Javier Milei y Victoria Villarruel.
Esto demuestra, claramente, que no se puede nacionalizar una elección provincial, ya que el votante no necesariamente quiere a la misma fuerza gobernando a nivel nacional y al provincial.
Este artículo se publicó primero en Mendoza Today.
Fuente Mendoza Today