Con 85 mil hinchas en la cancha -récord en el siglo XXI- y dos realidades que se cruzan, arrancará a las 15.30 de este domingo. El local buscará refrendar su despegue. La visita, certificar su estilo y su plan.
Muy acertada la decisión de la FIFA la de enviar a Buenos Aires el trofeo del Mundial de Clubes para esta fecha. Muy. Y es que ameritaba que de repente esa especie de astrolabio dorado viera de qué se trata el fútbol de acá. El del fin del mundo. Que no se trata de entender sino que se siente.
Que no se explica.
¿O acaso en algún lugar de ese planeta Tierra que representa esa estatuilla diseñada por Tiffany & Co ocurre lo que se dará hoy, pasaditas las 15.30?
En River, compenetrados.
Posiblemente no se dé en otra parte un espectáculo como el de este River-Boca. La rutina dominguera parada. Un show de decenas de puntos de rating. Uno de ellos, representado por las 85.018 personas que se acomodarán en un Monumental a tope para ver cómo chocan dos realidades que se medirán en un partido único. Por atmósfera. Por propuesta.
Porque para River, esta posibilidad de agarrar a un Boca afianzado a nivel doméstico post golpe copero se le presenta ideal para refrendar todo aquello que mostró en sus dos últimos partidos.
En los que sintió que el avión, después de kilómetros carreteados, pareció despegar su tren de aterrizaje de la pista.
Todo gracias a la aparente consolidación de un equipo que no sale de memoria pero casi, con una figura excluyente (Franco Mastantuono) y estrellas de importación (Seba Driussi, Enzo Pérez, Giuliano Galoppo, Gonzalo Montiel) que poco a poco van sincronizando su juego con las pretensiones de su deté, Marcelo Gallardo.
Será única la posibilidad de River de imponer su idea en un partido de primera línea. Pero también será excelente para Boca la oportunidad de retroalimentar la confianza que ha venido mostrando, especialmente a partir de la eliminación en la Copa Libertadores.
Esta vez sin el desgarrado Edinson Cavani, una figura excluyente a pesar de la eventual sequía. Pero con talentos jovenes que se han amoldado a la horma nueva (Milton Delgado), que ya se han ganado espalda (Agustín Marchesin) o que vienen demostrando voracidad en pos de ser parte (Miguel Merentiel, Milton Giménez).
Para Boca, un partido que puede ser clave (Fernando de la Orden).
Es cierto: por ley de probabilidades, hay chances de que a alguno de los dos el plan no le termine resultando tan redondo.
Que de pronto ese River que se entusiasmaba pierda vigor por un traspié, que recaiga de sus hasta hace poco crónicas dificultades para convertir (se medirá ante una defensa y un arquero sólidos) y que por ende acabe replanteándose algunas cosas.
Que el Boca que planea ser campeón replicando hasta la última instancia de este torneo un fútbol de a ratos estéticamente entretenido de golpe se lleve un trompazo como el que le pegó Newell’s y eso lo lleve a recortar su optimismo.
Todo eso también hace única esta fiesta. La más convocante de la historia moderna del fútbol nacional, peleándole el récord al Nacional 76. Y mostrándole al planeta de qué se trata la exigencia de este partido. El que en los fríos papeles quedará grabado como un mero interzonal.
La cancha lucirá a tope (Maxi Failla).
Que no definirá nada en términos deportivos, sí en todo caso anímicos. Un show que querrá mirar todo el mundo.
Las probables formaciones de River y Boca
El probable 11 de River
Armani Montiel Pezzella Martínez Quarta Acuña Castaño Enzo Pérez Galoppo o Meza Mastantuono Driussi
Así será el operativo del clásico
El Comité de Seguridad en el Fútbol comunicó que habrá más de 1.000 efectivos y 120 cadetes de la Policía de la Ciudad afectados al operativo de control, y otros 650 Agentes de Seguridad Privadas.
En pos de resguardar a los 85.018 asistentes a la cancha de River, habrá además 80 Agentes del Cuerpo de Tránsito y Agentes de Prevención del Ministerio, quienes fiscalizarán que no haya vehículos estacionados en rampas o veredas.
Las puertas del estadio se abrirán a las 12.30 y se recomienda a los hinchas llegar con antelación para evitar aglomeraciones y demoras en los accesos. De todas maneras, el dispositivo de seguridad dispuesto comenzará a ejecutarse desde las primeras horas de la mañana.
Fuente OLE