Martín Bidegaray
Los precios “regulados” son aquellos en los que el Estado tiene injerencia y participación en su determinación. Se supone que, en una economía libertaria, el Estado debería dejarlos moverse sin las restricciones de gobiernos anteriores. Sin embargo, la administración de Javier Milei parece haberle tomado el gusto a algunos “congelamientos” de precios.
YPF anunció el martes una rebaja del 4% en el precio de los combustibles. A su vez, la secretaría de Energía anunció que no hará modificaciones en los impuestos que gravan las naftas y gasoil. Y, un poco más para atrás, la revisión integral tarifaria -que iba a determinar los valores de los servicios de luz y gas por el próximo quinquenio desde comienzos de abril- postergó esa decisión para fines de mayo o junio, en un nuevo retraso con respecto al cronograma original.
Ninguna de las explicaciones oficiales sobre este comportamiento utiliza la palabra “inflación”. En todos los casos, se utilizan otros justificativos. Pero el resultado final se sentirá en el IPC del Indec de los próximos meses, ya que un componente que presionó a la suba en 2024 -como combustibles y servicios públicos- tendrá un impacto menor en estos meses, en especial en mayo.

“YPF informa una reducción del 4% promedio en los precios de sus combustibles (nafta y gasoil) en todo el país a partir del 1° de mayo. Cabe destacar que esta es la segunda baja en los precios en menos de un año, ya que la anterior se implementó en octubre de 2024”, comunicó la petrolera.
“Esta decisión se toma a partir del monitoreo constante de variables clave que realiza la compañía para definir su política de precios, como son el valor internacional del Brent, el tipo de cambio, la carga impositiva y el precio de los biocombustibles”, puntualizaron.
El precio del petróleo Brent es el factor más importante a la hora de marcar los precios de los combustibles. Ese comodity estaba en u$s 75 a comienzos de abril. Fue antes del inicio de la guerra de aranceles que inició el presidente estadounidense Donald Trump. Desde ese anuncio, el petróleo se desplomó y ayer cerró en u$ 63. La caída fue del 12%. Algunos creen que existe margen para seguir disminuyendo el valor en surtidores.
A mediados de mes, El Cronista preguntó a YPF si planificaba una baja en los precios de los combustibles. En ese momento la respuesta fue que tenían que ver la “evolución mensual”, ya que la decisión de importes se tomaba como un promedio de la cotización del petróleo durante 30 días.
Para acompañar a las petroleras, el Gobierno decidió no aplicar en mayo la actualización correspondiente a los impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC). “Esta medida busca sostener la estabilidad de precios en un contexto de desaceleración inflacionaria y consolidación macroeconómica, priorizando el alivio para los consumidores sin afectar la competitividad del sector energético”, comunicaron.
Servicios públicos
El resultado de la revisión tarifaria quinquenal (RQT) para las tarifas de luz y gas estaba previsto para el 1° de abril, pero -inicialmente- se postergó por un mes, para comienzos de mayo. Los entes reguladores (Enre en electricidad, Enargas en gas) tienen que entregar los informes en que los que avanzan con los aumentos autorizados para ambos servicios.
Hace una semana, los reguladores (Enre y Enargas) avisaron de una prórroga de 60 días para determinar los nuevos cuadros tarifarios. “La prórroga de 60 días de la definición de los nuevos cuadros tarifarios, obedece a una necesidad formal ya que sino se perdía la validez de la Audiencia Pública 106 (del 6 de febrero). Es estrictamente por los plazos procesales. Los nuevos cuadros tarifarios se publicarán en mayo”, informó Energía.
Las empresas presentaron, durante las audiencias públicas en el verano, sus planes de inversiones y los incrementos que requerían para poder cumplirlos. Los reguladores tomaron nota y después harán su propia evaluación.
Las tarifas para el período 2025-30 se iban a implementar desde el 1° de abril. Luego, la secretaría de Energía deslizó que las correcciones serían desde el 1° de mayo. Ahora, volvieron a patear por “60 días” (lo que implicaría que sean en junio), pero aclararon que será en mayo.
“Ya hubo varias revisiones tarifarias que después no se cumplieron. Eso no queremos que pase. Queremos que esta revisión se cumpla”, enfatizan en el Ejecutivo.
Enargas -que regula el gas-, decide las tarifas de las distribuidoras de gas. “El informe allí está un poco más demorado, porque todavía hay algunos gastos a revisar”, describieron conocedores del asunto.
En el Gobierno también echaron a correr el rumor que ambos organismos de control (Enre y Enargas) podrían llegar a ser fusionados El Enre tiene autoridad de aplicación en la ciudad de Buenos Aires y el conurbano (AMBA), mientras que Enargas comprende a todo el país.Energía -que depende de Economía- avanzará en algunas modificaciones en las regulaciones de líneas de transmisión eléctrica. El transporte eléctrico creció menos que el consumo y eso provoca “cuellos de botella” en las líneas.
Los subsidios energéticos vienen en caída. En 2024, representaron cerca del 1% del PBI. Y el Gobierno se comprometió con el FMI a seguir disminuyéndolos, para que representen un 0,6% del PBI en 2025. Las subvenciones acumularon $ 6,5 billones en 2024 y el objetivo es que sean de $ 5 billones en 2025, según el entendimiento entre Argentina y el organismo multilateral.
El Gobierno ya recategorizó a hogares que no habían presentado información y los mandó a la categoría N1 (ingresos altos), donde no hay subvenciones. Aunque sabe que se necesitan más cambios, en Energía creen que hay que estudiarlos y aducen que les faltan datos.
Fuente El Cronista