Buenos Aires, 2 de julio de 2025 – Total News Agency-TNA-Una cooperativa del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), dirigida por allegados al dirigente Juan Grabois, atribuyó a los propios vecinos la demora en las obras de infraestructura en los terrenos entregados, según denunció el medio Periodismo y Punto y reportó el usuario de X “Agarra la Pala”.
La agrupación recibió un aporte de 1.200 millones de pesos del Fondo de Infraestructura Social Urbana (FISU), gestionado por el ministerio que conduce Luis Miño. Las tierras, destinadas a ofrecer lotes con servicios básicos —agua, luz y desagües—, debían estar listas en octubre de 2023, pero aún siguen sin esos servicios esenciales.
En declaraciones difundidas en redes, la cooperativa imputó el incumplimiento a los beneficiarios de los lotes, señalando que “no cortan el pasto”, como justificación para la paralización de las tareas. Según la investigación del portal, las familias denuncian que los terrenos carecen de redes de agua potable, instalaciones eléctricas y conexión cloacal, lo que amenaza su dignidad y calidad de vida.
Este episodio se suma a las críticas dirigidas contra “El Arca de Juan”, informe elaborado por el programa La Cornisa en LN+, que denunció un presunto “curro” montado en torno a los negocios de personas cercanas a Grabois.
La situación pone en evidencia la disonancia entre el discurso declarativo del proyecto social impulsado por el MTE y la realidad de gestión en el territorio. La imputación de la responsabilidad en los beneficiarios, y no en los administradores del plan, generó malestar y denuncias por falta de transparencia.
Hasta el momento, ni el Gobierno ni la cooperativa emitieron un comunicado oficial para explicar los motivos de la demora ni los pasos que piensan dar para normalizar las obras necesarias. El caso amenaza con sumar tensiones a la discusión sobre el uso de los fondos públicos y la eficacia de los programas destinados a sectores vulnerables.