
El presidente Javier Milei está logrando uno de los objetivos políticos más importantes planteados desde el inicio de su carrera política allá por el 2021: transformarse en la única opción para enfrentarse al kirchnerismo.
Tras la disolución de Juntos por el Cambio y el pase de varios ex macristas a las filas de La Libertad Avanza, desde finales del 2023 sus aspiraciones avanzan como una topadora que no frena ante ninguna circunstancia.
Fue así que se quedó con el armado bonaerense y el capitalino más competitivo luego de subordinar al PRO de Mauricio Macri, primero con las gestiones de Sebastián Pareja y Cristian Ritondo en la Provincia de Buenos Aires, y luego con las negociaciones entre el propio ex presidente y su hermana Karina Milei en el escenario porteño.
Más allá de puntuales espacios provinciales y municipales, el PRO perdió todo tipo de identidad a nivel nacional, con dos ex aspirantes a presidente que ya no pertenecen al partido y con arreglos electorales cuyos beneficiarios son en primera instancia los libertarios.
Lo último que quería Macri era entregar la identidad partidaria del PRO a LLA, pero también estaba consciente de que el arreglo con los Milei le permitiría poner dos diputados nacionales. De no haber llegado a un acuerdo podría haberse quedado con solo una banca en la Cámara baja.
Por otro lado, tras la derrota del 2023, Macri busca bajarse del tablero político. Así se lo hace saber a sus más íntimos, pero no encuentra a nadie que lo baje del escenario de forma cómoda y decorosa.
En un principio, el elegido natural para tamaña tarea era el propio Ritondo, con quien hoy el ex presidente mantiene cierta distancia. Otros nombres comienzan a sonar. María Eugenia Vidal y Silvia Lospennato se encuentran en la cabeza de la lista blanca.
Sin embargo, Macri es un tipo desconfiado y antes de soltar la política del todo analizará cada uno de los escenarios posibles. Hoy apoya la gestión del presidente, pero no descarta construir un espacio renovado, que incuya a un PRO más fuerte, de cara a las elecciones del 2027 con el fin de disputarle el poder real a los Milei.
En el último tiempo convergieron distintos líderes políticos en pos de un armado electoral amplio pero a la vez competitivo, en el que suenan nombres como Miguel Ángel Pichetto, Juan Schiaretti e incluso la vicepresidenta Victoria Villarruel, hoy completamente alejada de la gestión del Gobierno Nacional.
La idea de este frente es devolverle algo de modales a la política y correr el extremo de la derecha hacia el medio, con un poco más de supuesta franquesa y alegando el respeto a la institucionalidad.
Si hoy Macri se corre del medio de la escena política es porque finalmente no encontró un punto de acuerdo con los diferentes sectores y actores con los que piensa construir un nuevo espacio político y, asimismo, halló quien lo pueda “jubilar” de la mejor manera posible.
Ambas cosas deben ocurrir o, por el contrario, el ex presidente seguirá siendo un “influenciador” de la política nacional a pesar de que hoy muchos ya lo dan por retirado. Solo el tiempo dirá.
Este artículo se publicó primero en Mendoza Today.
Fuente Mendoza Today