Mantener un auto no solamente incluye realizar el pago correspondiente del seguro y los impuestos, si no que atender la parte mecánica es fundamental para garantizar un buen funcionamiento y evitar inconvenientes en el motor. Es por eso que hay un arreglo que siempre se debe hacer y es imprescindible realizarlo.
El arreglo que siempre hay que hacerle al auto
Periódicamente se tienen que realizar controles al auto conocidos como “service” en donde se controla el estado de los filtros y el aceite, la amortiguación, el tren delantero y diversas cuestiones que son de vital importancia. No obstante, hay una parte que es fundamental para el motor que siempre debe ser atendida y es la correa de distribución.
La correa de distribución es la pieza que se encarga de sincronizar el movimiento del cigüeñal y las levas, asegurando que las válvulas y los pistones trabajen de manera coordinada al momento de utilizar un vehículo. Cuando se corta, puede generar fallas en los cilindros y esto podría derivar en un arreglo casi total del motor.

Los especialistas en mecánica automotriz recomiendan realizar el cambio de la correa de distribución entre los 60.000 y 100.000 kilómetros, o cada cuatro años. Lo más importante a tener en cuenta es la cantidad de KM recorridos desde el último cambio para saber, aproximadamente, cuándo debe modificarse.
Además, el material de la correa de distribución suele estar hecho de caucho o goma, por lo que el desgaste es permanente y no existe un método concreto de determinar cuándo podría entrar en falla. Es por eso que es fundamental tener en cuenta la cantidad de kilómetros del auto y registrar cuándo se hizo el último cambio para saber en qué momento realizarlo y evitar inconvenientes de gravedad en el motor.
Service completo del auto: qué se debe arreglar y controlar a tiempo
Realizar el famoso service del auto es algo que todos los conductores deben tener en consideración al momento de tener un vehículo ya que es un chequeo fundamental para garantizar que todas las partes están en completo funcionamiento.
Por ende, los controles que se le deben hacer a un auto son:
Cambio de filtro y aceite:
- Cambiar el aceite y el filtro sirve para mantener la correcta lubricación del motor, eliminando impurezas que pueden dañarlo. Esto previene el desgate y mejora la vida útil del vehículo.
Control y cambio de batería:
- Las baterías de los autos tienen una vida útil de 3 o 4 años, según el tipo de uso y marca, y realizar chequeos para ver su estado es importante. Cambiarla, por su parte, contribuye a que no se fuerce el sistema de arranque.
Revisión de frenos:
- En un taller mecánico se debe consultar sobre el estado de los frenos, los discos y la inyección de los mismos, como así también el líquido que llevan para garantizar la seguridad en la circulación del auto.
Neumáticos:
- Chequear las cubiertas no solo implica el control de los niveles del aire, si no del desgaste de las mismas, ya que con el andar pueden perder agarre al suelo.
Alineación y balanceo:
- Este control es fundamental y se debe hacer anualmente o al momento de salir a la ruta para controlar la estabilización del auto.
Fuente El Cronista