Los ministros de Exteriores de ocho países europeos, entre ellos el español José Manuel Albares, han ratificado este domingo su condena sin paliativos a la nueva ofensiva que prepara Israel en la Franja de Gaza.Albares y sus homólogos de Islandia, Irlanda, Luxemburgo, Malta, Noruega, Portugal y Eslovenia condenan así de manera «enérgica» el anuncio del Gobierno israelí, que se materializará en principio a partir del próximo mes de octubre, previa orden de evacuación forzada para todos sus residentes, que tendrán dos meses para abandonar el lugar antes de la entrada del Ejército, según las líneas maestras del plan avanzadas por los medios israelíes.Los ministros de Exteriores entienden que esta decisión «solo agravará la crisis humanitaria» en Gaza y «pondrá en mayor peligro la vida de los rehenes restantes» en manos de las milicias palestinas. «Esta operación provocará un número inaceptablemente elevado de muertes y el desplazamiento forzado de casi un millón de civiles palestinos», han añadido en un comunicado publicado este domingo.Noticia Relacionada estandar No Netanyahu planea conquistar todo Gaza en cinco meses para desplazar a un millón de palestinos y asfixiar a Hamás Dounia Sbai Israel ya controla el 75% de la Franja y ahora espera tomar el territorio restante con el asedio de la ciudad de Gaza en cinco fasesLos firmantes rechazan también con firmeza «cualquier cambio demográfico o territorial» en los territorios palestinos ocupados al entender que «constituye una flagrante violación del Derecho Internacional y del Derecho Internacional Humanitario».La ofensiva planeada por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y la ocupación de la ciudad de Gaza que contempla «representan un grave obstáculo para la implementación de la solución de dos Estados, que es el único camino hacia una paz integral, justa y duradera».Los ministros insisten además en que la Franja de Gaza debe ser parte integral del Estado de Palestina, junto con Cisjordania, incluida Jerusalén Este, y han añadido que «el reconocimiento de Palestina e Israel es la mejor garantía de seguridad para ambos y asegurará la estabilidad de toda la región».Por último, todos los firmantes repiten sus peticiones previas para intentar resolver el conflicto a corto plazo: «un acuerdo de alto el fuego inmediato y el cese permanente de las hostilidades, la liberación inmediata de todos los rehenes a manos de Hamás y la entrada rápida, sin trabas y a gran escala de la ayuda humanitaria».Finalmente, también coinciden en que el futuro político de Gaza no contempla la existencia de Hamás como fuente de autoridad ni cuerpo de seguridad. «Hamás no puede tener ningún papel en el futuro gobierno ni en los acuerdos de seguridad en Gaza, y debe ser desarmado», han concluido.
Fuente ABC