Buenos Aires, 3 de septiembre de 2025-Total News Agency-TNA-El riesgo país argentino volvió a encender alarmas en los mercados financieros. Tras las últimas medidas del Gobierno, el indicador se acercó este miércoles a los 900 puntos básicos, marcando el nivel más alto en los últimos cinco meses y reflejando el creciente escepticismo de los inversores sobre el rumbo económico.
La suba del riesgo país encarece de manera directa el financiamiento externo. Con estos niveles, la Argentina queda prácticamente fuera de los mercados internacionales de crédito, obligando al Tesoro a depender de colocaciones locales a tasas más elevadas o de adelantos del Banco Central. Esta dinámica se traduce en mayores costos para el Estado, presiona sobre el déficit fiscal y, en última instancia, impacta sobre la inflación.
Los analistas advierten que la escalada genera un efecto contagio en el sector privado. Las empresas enfrentan mayores dificultades para acceder a crédito internacional, ven restringidos sus planes de inversión y deben convalidar tasas más altas en la plaza doméstica. La consecuencia inmediata es un freno en la actividad económica y una presión adicional sobre el empleo.
En el plano político, la desconfianza de los mercados también afecta la estabilidad del programa económico del presidente Javier Milei. La falta de señales claras en torno a la consolidación fiscal y la demora en la llegada de divisas frescas derivan en un círculo vicioso que retroalimenta la volatilidad cambiaria y la incertidumbre general.
El dato de hoy pone en evidencia que, lejos de disiparse, las tensiones financieras siguen creciendo. La evolución del riesgo país será clave para determinar si el Gobierno logra recuperar credibilidad en su estrategia económica o si, por el contrario, la Argentina se encamina a un nuevo episodio de crisis de deuda.