Buenos Aires, 05 de septiembre de 2025-Agencia Total de Noticias-TNA- En medio de la tormenta desatada por las acusaciones de coimas que salpican a su hermana Karina, el presidente Javier Milei ha recurrido a una fuente poco convencional para calmar las aguas: una supuesta conversación con Dios, a quien él llama “el Uno”. Según revelaciones del periodista Juan Luis González que reprodujo Noticias, el mandatario habría confiado a un amigo cercano en la Quinta de Olivos que el Creador le aseguró que el escándalo, bautizado como “Coimagate”, no lo afectará.
La confidencia, que dejó atónitos a quienes la escucharon, refleja el lado místico de Milei, un rasgo que ha marcado su trayectoria y que González detalla en sus libros El Loco y Las Fuerzas del Cielo. El presidente, según múltiples fuentes, sostiene que mantiene una conexión directa con la divinidad, quien le habría encomendado la misión de liderar Argentina para salvarla del “maligno” —asociado al comunismo, en su visión— y guiarla hacia la prosperidad. En este esquema, su hermana Karina, señalada por su presunta capacidad de “canalización angelical” para comunicarse con seres fallecidos, y su difunto perro Conan, supuestamente sentado junto a Dios, juegan un papel central.
Milei no solo habría dialogado con “el Uno” sobre su destino político. Fuentes cercanas aseguran que el presidente ha relatado sueños en los que conversó con figuras históricas como el rey David, fallecido hace casi tres milenios, quien le habría aconsejado trasladar la embajada argentina en Israel a Jerusalén. También se le atribuyen diálogos imaginarios con la filósofa Ayn Rand y el economista Murray Rothbard, referentes del libertarianismo. “Hablé con Rothbard y me dijo que vamos bien”, habría dicho Milei en más de una ocasión tras momentos de introspección.
El ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, también fue protagonista de estas anécdotas. Según González, Milei lo convenció de sumarse a su gabinete asegurándole que “el Uno” lo había designado como parte de un plan divino. La esposa de Caputo, conmovida por la revelación, habría influido en la decisión del ministro, quien más tarde bromeó en público: “Las fuerzas del cielo actuaron sobre mi esposa, y por eso estoy aquí”.
El relato, que combina esoterismo y política, ha generado reacciones mixtas. Mientras algunos empresarios que escucharon la anécdota en Olivos apenas contuvieron la risa, otros ven en la fe de Milei una explicación para su inquebrantable confianza en medio de las crisis. El “Coimagate”, que involucra a Karina Milei y presuntas irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad, ha puesto al gobierno bajo intenso escrutinio. Sin embargo, el presidente parece imperturbable, amparado en la certeza de que, como en su llegada al poder contra todo pronóstico, la voluntad divina lo protegerá.