Brasil: Yacimientos de Tierras Raras Intensifican la Disputa Geopolítica entre China y Estados Unidos
Brasilia, 6 de septiembre de 2025-Total News Agency-TNA-Brasil, bajo el liderazgo de Luiz Inácio Lula da Silva, ha virado hacia China en la feroz disputa global por las tierras raras, un recurso crítico para la tecnología y el armamento, intensificando las tensiones con Estados Unidos en un contexto que podría redibujar el equilibrio geopolítico mundial. Con la segunda mayor reserva de estos minerales, estimada en 21 millones de toneladas, Brasil se posiciona como un actor decisivo en una carrera tecnológica que expertos advierten podría desencadenar conflictos de alcance global.
La empresa Serra Verde, operadora del yacimiento Pela Ema en Goiás, iniciará en 2026 la extracción de 5.000 toneladas anuales de tierras raras como neodimio, praseodimio, terbio y disprosio, esenciales para baterías, turbinas eólicas, vehículos eléctricos y sistemas militares avanzados. Mientras China, con 44 millones de toneladas y un dominio del 85% del procesamiento global, produce 270.000 toneladas anuales frente a las apenas 20 toneladas de Brasil, la decisión de Lula de priorizar alianzas con Pekín amenaza con consolidar el control asiático sobre estos recursos estratégicos.
Inicialmente, Brasil exploró una colaboración con Estados Unidos para desarrollar su industria minera y contrarrestar la hegemonía china. Sin embargo, las relaciones se fracturaron tras los aranceles impuestos por el gobierno de Donald Trump a productos brasileños, lo que Lula calificó como un ataque a la soberanía nacional. En respuesta, Brasil ha canalizado sus tierras raras hacia China, que posee la infraestructura para procesarlas a gran escala, un movimiento que Washington interpreta como una provocación en su lucha por asegurar suministros para su industria tecnológica y de defensa.
Las tierras raras, un grupo de 17 elementos con propiedades únicas, son el núcleo de la innovación en sectores como la electrónica y el armamento, alimentando una carrera armamentística entre Occidente y Oriente. Analistas advierten que la inclinación de Brasil hacia China podría no solo limitar el acceso de Estados Unidos a estos minerales, sino también exacerbar las tensiones geopolíticas, con riesgos de escalada hacia un conflicto de proporciones mayores. La decisión de Lula, en un momento de creciente polarización global, sitúa a Brasil en el centro de una pugna que podría redefinir las alianzas internacionales y la seguridad mundial.