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Ahorrar es uno de los objetivos financieros más comunes, pero también uno de los más difíciles de cumplir con constancia. La mayoría de las personas saben que deberían guardar una parte de sus ingresos, aunque pocas tienen una idea clara de cuánto consiguen retener a lo largo de los años y si su esfuerzo se traduce realmente en estabilidad económica.
Con este propósito, la economista Lorena Álvarez, profesora de empresa y finanzas, ha compartido en su canal de YouTube un método sencillo para comprobar la capacidad de ahorro de cada persona. Lo define como una “prueba de fuego”, un ejercicio que no requiere conocimientos técnicos y que, según ella, permite abrir los ojos sobre cómo se han gestionado las finanzas en los últimos años. “Tenemos que coger papel y boli y escribir de forma aproximada cuánto habéis ido cobrando en los cinco últimos años”, señaló en su vídeo, subrayando que la exactitud no es lo más relevante, sino el cálculo global.
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M. M. V.
El primer paso consiste en elaborar una lista con los ingresos percibidos en cada empleo o actividad durante los últimos cinco años, o en un periodo más corto si la persona lleva menos tiempo trabajando. A partir de ahí, se suman todas las cantidades obtenidas para obtener el montante total. El segundo paso implica revisar la cuenta bancaria: basta con anotar el saldo disponible al inicio de ese periodo y compararlo con el saldo actual. La diferencia refleja el ahorro neto acumulado.
Con los datos anteriores, se realiza una sencilla división: los ahorros acumulados se colocan en el numerador y los ingresos totales en el denominador. El resultado, multiplicado por 100, ofrece el porcentaje de ahorro real. “Con esta prueba vais a tener una visión muy realista de vuestra capacidad de ahorro y de vuestra gestión de las finanzas personales”, señaló la experta.
Según Álvarez, el resultado de este cálculo puede sorprender tanto en positivo como en negativo. Un porcentaje bajo no debe interpretarse como un fracaso, sino como un aviso de que es necesario tomar medidas. “Si obtienes un porcentaje, una ratio muy bajita, no te preocupes, este ejercicio no es para desanimarte, es solo para darte información, porque como ya he dicho en otros vídeos, la información es oro”, afirmó. En cambio, un resultado elevado es un indicador de buena planificación y constancia.
La economista insiste en que la finalidad de este ejercicio es brindar un punto de partida para mejorar la gestión económica personal. “Repito que no consiste en sentirse mal, simplemente consiste en tener información, en saber cómo estamos llevando a cabo toda esta gestión”, recalcó. A partir de ahí, recomienda profundizar en técnicas de planificación, control del gasto y hábitos de ahorro sostenibles.
Fuente El Confidencial