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Buenos Aires, 19 noviembre 2025-Total News Agency-TNA-.La Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado dictaminó este martes por mayoría el rechazo del pliego de la senadora electa por La Libertad Avanza (LLA), Lorena Villaverde, en un golpe al oficialismo que obliga a una votación en el recinto el 28 de noviembre para decidir si asume la banca por Río Negro. Con 12 de 19 firmas, el dictamen –no vinculante– suma los ocho votos del peronismo a los de Guadalupe Tagliaferri (PRO), Pablo Blanco (UCR), Juan Carlos Romero (Cambio Federal) y Alejandra Vigo (Unidad Federal), motivados por los antecedentes penales de Villaverde en Estados Unidos y sus nexos con Fred Leonardo Machado, un argentino extraditado por lavado de activos y narcotráfico.
La decisión, que LLA anunció contrarrestar con un dictamen de minoría favorable a Villaverde y rechazos a los pliegos de Jorge Capitanich y Martín Soria (Unión por la Patria, UP), reaviva el fantasma de la “ficha limpia” en un Congreso fragmentado. Villaverde, de 43 años y exdiputada nacional por LLA en 2021-2023, enfrenta cuestionamientos por su condena en 2015 en Florida por posesión y compra de cocaína –pena atenuada a libertad condicional tras delatar a proveedores–, y por su amistad con Machado, detenido en 2023 en Brasil y extraditado a EE.UU. por blanquear 10 millones de dólares vía bienes raíces en Miami. “No podemos abrirle la puerta del Senado al crimen organizado”, declaró la senadora Anabel Fernández Sagasti (UP), aludiendo a viajes compartidos y negocios inmobiliarios que, según la oposición, financiaron su campaña en Río Negro con fondos dudosos.
El debate en comisión fue un torbellino de acusaciones. José Mayans (UP), presidente del bloque, abrió fuego: “Villaverde tiene comprobado tráfico de drogas y relación directa con el narcotráfico; no puede sentarse aquí”. Romero, histórico antiperonista que ahora se aleja del oficialismo, sorprendió al firmar el rechazo: “Una cosa es política, otra es pasar por la Justicia penal de EE.UU. Sus vínculos con gente de las drogas y fraudes inmobiliarios son inaceptables; recordemos a Escobar en Colombia, que llegó a diputado y lo rechazaron para preservar el sistema”. Blanco (UCR) fue tajante: “Mi conciencia no permite que alguien ligada al narco forme parte de esta institución”. Tagliaferri (PRO) rechazó la “doble vara moral” de LLA, que defiende aviones privados sin distinguir si son “narco o no narco”.
Desde LLA, las defensas fueron airadas. Luis Juez (PRO, aliado) desestimó las imputaciones: “Es mentira absoluta; las resoluciones judiciales lo confirman. No hay inhabilidad, y la Corte Suprema validó su título”. Juan Carlos Pagotto (LLA) invocó el artículo 55 constitucional: “No juzgamos moralidades; se decide en recinto con mayoría calificada. Todos usamos aviones privados; quien esté libre de pecado, que tire la primera piedra”. Ezequiel Atauche (LLA), presidente interino del bloque, lo tildó de “show mediático”: “El electorado eligió a Villaverde; no hay sobreviniente inhabilidad”. El oficialismo, con solo cinco firmas en comisión, apuesta a sumar disidentes en el pleno, donde LLA creció a 11 senadores tras las elecciones de octubre.
La maniobra de Patricia Bullrich, jefa del Senado, fue clave: impulsó impugnaciones a Capitanich –por supuestas irregularidades en Chaco– y Soria –por conflictos de interés en Santa Fe–, en un contraataque para presionar a UP. “Es una jugada para equilibrar la balanza”, admiten fuentes cercanas a la ministra, quien ve en Villaverde un activo para Río Negro, provincia clave en el federalismo libertario. Sin embargo, el rechazo preliminar complica la aritmética: LLA necesita 25 votos en el Senado (de 72) para imponerla, y con el peronismo unido (32) más radicales y PRO disidentes, las chances son escasas.
El caso Villaverde, que ya motivó una causa en Comodoro Py por lavado de campaña en 2023, resalta la hipocresía en la política argentina. Positivo es que se aparte a una figura con nexos probados al narcotráfico –su delación en EE.UU. y amistad con Machado, condenado a 20 años en 2024 por traficar 500 kg de cocaína–, pero surge el debate: ¿por qué no someter a rinoscopias o análisis de bulbo capilar a todos los legisladores, ministros, secretarios y asesores? Sin duda “podrían haber muchas sorpresas”, recordando escándalos como el de 2018 con senadores radicales o rumores en 2025 sobre asesores de Economía con vínculos en el conurbano. La UCR y PRO, que firmaron el rechazo, enfrentan demandas similares por sus filas.
Villaverde, abogada y empresaria inmobiliaria, defendió su inocencia en un comunicado: “Fui perseguida por ser libertaria; mi condena fue por posesión personal, no tráfico, y Machado es un conocido lejano”. Su campaña en Río Negro, financiada con 50 millones de pesos de donantes anónimos, ya está bajo escrutinio de la AFIP. Si el Senado la rechaza –probable con 37 votos opositores–, LLA perdería una banca estratégica, forzando a reasignar suplentes como Victoria Villarroel. Para Milei, que prioriza la “casta” como enemigo, este traspié legislativo erosiona su narrativa de renovación.
El 28 de noviembre, el recinto definirá no solo el destino de Villaverde, sino el tono de un Congreso donde LLA creció a 11 senadores pero depende de alianzas frágiles. En un país con 40% de pobreza y narcotráfico en ascenso –según la ONU, Argentina es ruta clave para 100 toneladas anuales–, apartar a Villaverde es un paso ético, pero insuficiente sin una “limpieza general”. Como ironizó Romero: “Preservemos el sistema antes de que nos preserve a nosotros”.
