Por Darío Rosatti
Buenos Aires, 8 de diciembre de 2025 – Total News Agency-TNA-La llegada de Cristian Ezequiel Auguadra a la conducción de la SIDE, presentada oficialmente como parte de una modernización del sistema de inteligencia, abrió un frente inesperado dentro del propio Gobierno: la aparición de documentación que lo vincula a un entramado millonario de sociedades offshore, operaciones inmobiliarias en Miami, empresarios del fútbol argentino y estructuras financieras opacas que operaron durante años sin control aparente ni supervisión estatal.
El mapa societario que rodea al flamante jefe de inteligencia es extenso y, en varios tramos, inquietante. Entre 2017 y 2021, Auguadra figura como manager, miembro autorizado o signatario operativo en al menos siete sociedades radicadas en Florida y Belice: Sparrow Investors LLC; Bizarak LLC; Goose Investment 3419 LLC; Goose Investment 2709 LLC; Goose Investment 2023 LLC; Goose Investment 907 LLC; Goose Investment 10G LLC, varias de ellas administradas a través de Bastille Investments Inc., una firma offshore constituida en Belice bajo estrictos regímenes de opacidad.
De acuerdo con la documentación comercial estadounidense, estas sociedades fueron utilizadas para adquirir y vender propiedades de alto valor en Miami, incluyendo un departamento en Continuum South Beach, valuado en aproximadamente USD 3,5 millones, cuya compra fue realizada por Sparrow Investors LLC pocos días después de constituirse y cuya posterior venta fue firmada por el propio Auguadra en su carácter de “miembro autorizado”. Otras operaciones inmobiliarias —por montos que van desde USD 240.000 a 860.000— están registradas a nombre de las distintas Goose Investment LLC, que compartían dirección operativa en 2275 Biscayne Boulevard, un domicilio recurrente en estructuras corporativas utilizadas por argentinos con actividad económica en el exterior.
Pero la trama no se detiene en el plano financiero. La composición societaria incluye nombres de peso en el mundo del fútbol y sus circuitos paralelos. Entre ellos, Mariano Pastor, empresario radicado en Miami con fuertes vínculos con jugadores, representantes y patrocinadores; Héctor Hermida y Raúl Tauz, ligados históricamente a la dirigencia de clubes argentinos y mencionados en investigaciones por administración irregular; y Miguel Ángel Pires, uno de los managers más influyentes del fútbol argentino durante las últimas dos décadas, señalado en diversas causas por supuestas operaciones irregulares vinculadas al pase de jugadores y contratos comerciales.
La presencia simultánea de estos nombres en estructuras offshore conectadas con Auguadra —hoy jefe del organismo con más de los fondos reservados de la Nación— abre interrogantes profundos sobre la naturaleza real de esas sociedades: ¿inversiones privadas legítimas o una red de triangulación financiera que operó durante años desde el exterior y sin control fiscal argentino?
La situación se agrava ante un dato central: la declaración jurada patrimonial de Auguadra no es pública ( por ser el titular de la SIDE) y no existe evidencia de que las propiedades y participaciones societarias en Miami hayan sido declaradas conforme a la normativa argentina vigente. En un funcionario encargado de manejar recursos reservados, información clasificada y la supervisión interna del sistema de inteligencia, la opacidad patrimonial constituye un riesgo institucional grave.
La investigación también señala a Bastille Investments Inc. —la firma beliceña— como nexo estructural entre varias de las sociedades vinculadas a Auguadra. Belice es uno de los destinos utilizados históricamente para ocultar beneficiarios finales, lo que dificulta determinar quién financiaba las operaciones y con qué objetivos.
El caso también alcanza a su entorno familiar: su hijo Gonzalo Auguadra habría participado en un viaje a Bakú -fue primicia de TNA- con fondos reservados, simulando una reunión con otras agencias, pero Auguadra Jr no tiene cargo operativo ni experiencia en inteligencia, situación que ahora vuelve a la superficie ante el contexto de presunta falta de controles internos. En ese momento el actual secretario de SIDE, era titular de Asuntos Internos, quien debería haber investigado a su hijo y demás asistentes.
La pregunta que hoy circula entre especialistas en transparencia, sectores políticos y actores del propio sistema de inteligencia es contundente: ¿puede el jefe de la SIDE —responsable de custodiar los secretos del Estado— justificar un patrimonio offshore millonario, compartido con empresarios del fútbol, sin aclarar su origen ni su trazabilidad?
El Gobierno, por el momento, se mantiene en silencio. Pero el caso ya escaló lo suficiente como para convertirse en un nuevo test para una administración que prometió “cero opacidad” y enfrenta, con este episodio, uno de los desafíos más delicados desde que llegó al poder.
.La inteligencia no es un chiste y eso no parece ser tenido en cuenta. Agencias de inteligencia de estados Unidos están molestas porque desde SIDE se inventan operativos, una en particular junto a Paraguay y se utilizan fondos que en su mayoría proveen éstas, una en particular para luchar contra el narcocrimen, según pudo saber Total News Agency de primera mano.
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