Ciudad de México, México.- En 1944, con apenas 21 años, hizo su primera actuación en la radioemisora “La voz de los Ómnibus Aliados”. A partir de esa fecha ya su voz sería habitual en cada espacio radial y posteriormente, con la llegada de la televisión, Reynaldo Miravalles acapararía la atención de todos los medios de prensa.
Para el año 1952, el actor debutó con un papel de importancia en la televisión y ese mismo año recibió el premio del actor más destacado. Cuando le preguntaron a inicios de este siglo cómo fue esa experiencia contó:
“Cuando empiezo en la televisión ya había actuado mucho en teatro. La primera vez fui un extra sentado en una silla y, en la segunda ocasión, logré un protagónico junto a José Antonio Rivero. Al principio, para los actores populares y consagrados, la televisión era una cosa nueva y muchos le temían. Sus figuras no se correspondían con el éxito alcanzado en la radio. Eran galanes, pero de apariencia rechoncha. Otros, demasiado bajitos o feos. No querían afectar su puesto. Por eso, nos daban chance a los que no teníamos nada que perder. Los primeros trabajos en La Tremenda Corte, por ejemplo, siempre eran de contrafigura. La estrella que hacía reír era Leopoldo Fernández. Nosotros lo apoyábamos para que su actuación se destacara”.
Precisamente en la televisión fue donde se hizo más popular con su icónico personaje de Melesio Capote, “el guajiro Melesio”.De Miravalles hay que resaltar no solo sus innegables dotes humorísticas, el intérprete era también un impecable actor dramático.
Su talento lo llevó a ser uno de los actores recurrentes del cine cubano y uno de los más cercanos al gran Tomás Gutiérrez Alea. Reynaldo fue protagonista de filmes memorables como “Las doce sillas” , “El hombre de Maisinicú”, “Los Sobrevivientes”, “Los pájaros tirándole a la escopeta”, entre otras
En 1991, participó en una de las películas más polémicas del cine cubano, la comedia de humor negro “Alicia en el pueblo de maravillas”, de Daniel Díaz Torres.
Si bien el guion fue aprobado, se dio luz verde al proyecto y lo promocionaron durante dos años, su estreno coincidió con el colapso de la URSS; por ende, se determinó que no era el mejor momento para que el público viera el filme. Su ambigüedad política y polisemia podían ser usadas por los contrarrevolucionarios, justificó el cabecilla de la censura, Alfredo Guevara.
Tan solo tres días después de su estreno nacional, “Alicia en el pueblo de Maravillas” fue retirada de todos los cines cubanos. Incluso en algunos lugares fueron más lejos y la sustituyeron por la cinta soviética “El hombre anfibio”.
Poco después de este duro choque con la censura Reynaldo emigró a Estados Unidos, donde siguió actuando. Al cine cubano pudo volver en 2013 con Esther en alguna parte, bajo la dirección de Gerardo Chijona.
El 31 de octubre de 2016, Miravalles falleció en La Habana, donde estaba de visita a los 93 años. Para muchos no ha existido otro actor cubano con su talento y versatilidad.
Fuente Cubanet.org