Por Andrés Repetto
Los ensayos militares conjuntos de la alianza atlántica, junto con sus dos nuevos miembros, Finlandia y Suecia, los debates en Europa sobre la posibilidad de enviar tropas a Ucrania y las amenazas de una guerra nuclear por parte de Putin, se combinaron para generar una situación cada vez más tensa. Mientras Europa incrementa sus gastos en defensa; ¿cómo influirá la candidatura de Donald Trump en este conflicto?
Este año podría convertirse en un punto de inflexión en los eventos internacionales globales. Los conflictos que hemos presenciado durante años parecen haberse acelerado, todos al mismo tiempo, y muchos de ellos están interrelacionados. Si hay alguien que tiene sobre su escritorio una agenda minuto a minuto de lo que sucede en nuestro planeta, como si fuera un gigantesco Gran Hermano global, ese es el Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres. Quizás por esta razón, en una de sus últimas advertencias sobre cómo percibe lo que sucede en nuestro mundo, aseguró:
“El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, la plataforma principal para las cuestiones de paz global, está estancado por fisuras geopolíticas. No es la primera vez que el Consejo se divide, pero sí la peor. La disfunción actual es más profunda y peligrosa. Durante la Guerra Fría, los mecanismos bien establecidos ayudaron a gestionar las relaciones entre las superpotencias. En el mundo multipolar actual, esos mecanismos faltan. Y así, nuestro mundo está entrando en una era de caos. Y estamos viendo los resultados: una peligrosa e impredecible batalla campal con total impunidad.”
António Guterres, secretario general de la ONU. Foto: Reuters
Parece que ya no es necesario ocultar las cosas; todo está ahí para que veamos lo que está sucediendo. Quienes tienen el poder de presionar los botones de ese tablero global ya no necesitan de pantallas para llevar adelante sus planes. Todo parece estar permitido.
Hay un abanico de crisis simultáneas, pero quiero detenerme en lo que está sucediendo en Europa en estos días. La guerra en Ucrania ha entrado en su tercer año, y durante esta semana las declaraciones de sus participantes directos e indirectos fueron alarmantes. Desde que comenzó el conflicto, sostuve que somos parte de una nueva guerra mundial, por ahora, diferente a lo que recordamos de los últimos años de ese conflicto, pero global. La cantidad de países involucrados y el cara a cara entre las potencias occidentales y Rusia hacen claramente que este no sea un conflicto más.
Una pareja se abraza tras los bombardeos en Kharkiv, Ucrania. Foto: Reuters
Lo que me llamó la atención y debo confesarles que me preocupa, fue el tono de las declaraciones y advertencias que, como si se tratara de un juego de preguntas y respuestas, fueron enunciando los jefes de los gobiernos que componen la OTAN y las respuestas y amenazas que surgieron desde Moscú.
Ante la ofensiva rusa, su avance en algunos frentes puntuales y la caída de pueblos ucranianos, fue el presidente francés Emmanuel Macron quien ensayó una idea explosiva. Ante sus colegas y líderes de la oposición, habló sobre la posibilidad de llevar tropas a Ucrania. Si bien algunos de sus socios y aliados buscaron bajar el tono de las declaraciones, y la diplomacia europea buscó suavizar sus palabras, Putin entendió claramente el mensaje y, en un discurso ante su país -oportunidad que ocurre una vez al año- amenazó con una guerra nuclear. Ante la importancia de sus palabras y el escenario en el que fueron pronunciadas, les comparto textualmente el fragmento de ese mensaje:
“Están hablando de la posibilidad de enviar contingentes militares de la OTAN a Ucrania. Pero recordemos el destino de aquellos que una vez enviaron sus contingentes a nuestro país. Ahora las consecuencias para los posibles intervencionistas serán mucho más trágicas. También tenemos armas, ellos lo saben. También tenemos un arma que puede alcanzar objetivos en su territorio. Y deben entender que lo que están haciendo ahora es asustar al mundo entero. Existe el riesgo de un conflicto con armas nucleares, lo que significa la destrucción de la civilización. ¿No entienden esto, o qué?”
El discurso de Putin
Algunos análisis sobre las palabras del presidente ruso aseguran que en el contexto de las elecciones en Rusia, Putin buscó encender el patriotismo ruso y que por eso son solo palabras.
Desde mi punto de vista, no creo que nada de lo que diga alguien con su poder sea solo para amenazar a sus ex socios europeos. Debemos recordar otros discursos de años anteriores en los que Putin advirtió sobre las líneas rojas que, desde su visión, los países de la OTAN estaban cruzando en Ucrania y lo que ahora es una realidad: la guerra en Europa.
De hecho, si viajamos al pasado, tan solo tres años atrás, pocos hubieran imaginado lo que está sucediendo. El interrogante es si a esta altura y dadas las declaraciones y movimientos políticos y militares de las naciones que conforman la OTAN, seguirán buscando un escenario de más frentes abiertos con Rusia.
El presente nos pone en las pantallas de nuestros celulares, televisores y todo tipo de dispositivos, los ejercicios militares de la alianza del Atlántico. Miles de soldados, tanques y aviones ensayan. Sus líderes afirman que son ejercicios rutinarios, pero para el Kremlin es un plan de ataque. Todo esto con el agregado de dos nuevas naciones ahora protegidas por el escudo del Capitán América/OTAN: Finlandia y Suecia. Estas naciones no solo suman hombres, armas y recursos a la alianza, sino una gigantesca frontera con Rusia.
Preparada para su adhesión, Suecia se suma a ejercicios de la OTAN en el norte de Europa. Foto: Reuters
Todo está conectado en este mundo globalizado. Hace unos años, esos lazos se utilizaron para el comercio global y para acercar a pueblos y gobiernos. En la actualidad, son autopistas que también interconectan crisis y tensiones internacionales.
Del otro lado del Atlántico: Trump
Mientras en Europa se apresuran a engordar sus presupuestos militares y la fabricación de armas ante la posibilidad de que la ficción siga convirtiéndose en realidad, del otro lado del Atlántico, en Estados Unidos, la victoria de Trump en las internas republicanas, aún debe ser ratificada por la convención de su partido. Pero ya genera un terremoto en Europa.
Es conocida la simpatía de Trump por Putin y las advertencias del candidato a la presidencia estadounidense sobre Europa. Si sus aliados no invierten dinero en defensa, Trump ya dijo que él dejaría no solo que Rusia haga lo que quiera con ellos sino que alentaría a Putin a que lo haga. Estas palabras y su historial llevaron a todo un debate interno en el viejo continente.
No es Ucrania la única que tiembla ante la posibilidad de que un gobierno republicano no le entregue más ayuda para sostener el avance ruso, también es algo que ya temen muchos jefes de gobiernos europeos que en estos días levantaron la voz para prometerse entre ellos apoyo militar si un país “enemigo” los ataca.
Desde hace dos años, está a la vista el apoyo que Europa le está dando a Ucrania. Para Putin quienes alguna vez fueron sus socios europeos ya no lo son, el interrogante es cuándo se cruzará para Moscú esa línea y serán tratados como enemigos.
Donald Trump , expresidente de los Estados Unidos. Foto: EFE.
Esta crisis, por momentos, parece acelerar sus pasos y muchas situaciones se sucedieron en pocos días. A las declaraciones explosivas se sumaron además las publicaciones de conversaciones secretas entre altos mandos de un ejército que es parte de la OTAN: militares alemanes discutían cómo -con misiles que aún no le proporcionaron a Kiev- podrían atacar posiciones rusas clave en la Ucrania ocupada. Pero hubo más: gracias a esas revelaciones nos enteramos de boca de los militares alemanes que soldados británicos se encuentran interviniendo en el frente de batalla. Intervención directa en el conflicto, justamente lo que Putin advertía días atrás que podría darle vía libre para utilizar armas atómicas.
Este capítulo del espionaje sobre miembros de la fuerza aérea alemana podría dar más disgustos a los políticos en Berlín. Así lo reconoció el ministro de defensa alemán al sostener que situaciones incluso más graves podrían hacerse públicas. Lo que nos lleva a preguntarnos: ¿qué más podría salir a la luz?
Si esa información existe, ya está en poder de los rusos y como un misil de alta precisión buscará ser utilizada para dañar tanto como sea posible la unidad europea. La guerra en Europa se está desarrollando en todos los niveles y puede, según sus protagonistas, ir incluso más allá.
Fuente 26noticias