La Reserva Federal termina mañana su reunión periódica y se espera que mantenga sin cambios la tasa de interés. El mercado incorporó un contexto de tasas altas por más tiempo con un rally en los rendimientos de los bonos de EEUU.
Esto implica una baja en los títulos de deuda de EEUU, lo cual conlleva a un contexto más adverso para el universo de renta fija global. En otras palabras, viento de frente para los bonos argentinos.
Reunión de la Fed
Hay un 98% de chances de que la Fed dejará sin cambios la tasa en la reunión de mañana, por lo que se espera que la misma se mantenga en el rango actual de 5,25% y 5,5 por ciento.
Tras datos de inflación, empleo, consumo y actividad por encima de lo que esperaba el mercado, las expectativas de baja de tasas fueron menguando a lo largo del año.
La inflación dejó de mostrar una dinámica descendiente y volvió a rebotar. Por otro lado, la economía de los EE.UU. creó más puestos de trabajo respecto de lo que se esperaba, a la vez que el consumo minorista estuvo muy por encima del que proyectaban los economistas en Wall Street.
Todos estos datos confirmaron la expectativa de una nueva demora en el inicio de baja de tasas de la Fed.
Hoy el mercado espera que la primera baja de tasas de la Fed sea en diciembre, por lo que solo se espera un recorte de tasas en todo 2024.
Esto implica una fuerte contracción de las expectativas respecto de lo que se especulaba a comienzo de año, cuando se estimaban hasta seis bajas de tasas.
“Esperamos que la Reserva Federal muestre un tono más hawkish en la reunión del 1° de mayo, dado que los datos de inflación de los primeros tres meses del año han sido peores a lo esperado”, dijeron los analistas de Balanz.
Viento de frente
Los últimos datos macroeconómicos no van en línea con la necesidad de la Fed de bajar la tasa de interés, sino que incluso le dan más argumentos al banco central de EE.UU de tener que dejar la tasa en estos niveles, e incluso de subirla.
En este contexto, se consolida la idea del “higher for longer” de la Fed, por lo que el mercado consolida la idea de que la Fed mantendrá las tasas altas por más tiempo.
El mercado incorpora las expectativas sobre el futuro de la política monetaria de la Fed, desde un sesgo laxo hacia uno más restrictivo, las tasas de los bonos del Tesoro americano se dispararon.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años subieron siete puntos básicos tras la publicación del dato de PBI, alcanzando el 4,7%, tocando el valor más alto del año.
Por su parte, los rendimientos de los bonos americanos a 2 años subieron al 5%, también a máximos del año.
El hecho de que las tasas bajen implica que los bonos del tesoro de EE.UU están operando a la baja.
El índice de bonos de grado de inversión cae 4,6% en el año, mientras que el índice de bonos globales baja 3,6% en 2024.
Los bonos de emergentes retroceden 1,25% y la deuda de gado especulativo cae 0,7% en lo que va del año.
Así, debilidades en el mercado de bonos de EE.UU. terminan provocando un efecto contagio sobre el resto de los títulos de renta fija global, representando un viento de frente para estos bonos.
Los analistas de Consultatio advirtieron que el hecho de que las condiciones financieras se endurezcan supone un desafío extra para Argentina, que necesita acceder a financiamiento externo para que su deuda sea sostenible a partir de 2025.
En ese sentido, remarcaron que las variables locales se tornan más importantes.
“En este contexto, se vuelve más apremiante que el Gobierno pueda lograr el apoyo del Congreso para poder darle sostenibilidad en el tiempo a las mejoras que obtuvo en el frente fiscal, monetario y externo”, dijeron.
Factores domésticos
El hecho de que las tasas se mantengan altas por más tiempo podría representar un viento de frente para los bonos argentinos.
Sin embargo, hay cierto consenso de que las cuestiones locales podrían contribuir para que los bonos argentinos puedan seguir mejorando, aun pese a enfrentar un escenario global más adverso.
Juan Manuel Franco, economista jefa de Grupo SBS, explica que en un entorno de tasas altas, la deuda emergente se ve presionada, aunque en el caso nuestro, los factores domésticos pesan mucho.
“Creemos que, si bien el mercado externo, de ponerse volátil, implicaría algo de viento en contra, si se atienden a fondo los desequilibrios macro argentinos y se corrigen, aún podría haber valor para los inversores en deuda soberana en dólares de Argentina”, dijo.
Hasta ahora los bonos argentinos pudieron evitar el escenario global adverso gracias a una mejora en los fundamentals domésticos.
El giro político, la acumulación de reservas, las mejoras en el ámbito fiscal y externo permitieron que la deuda argentina tenga ganancias de entre 29% y 49% en el año, cuando emergentes retrocede poco más del 1% en 2024.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI), agregaron que la dinámica de los bonos globales operando por cuestiones locales tiene su origen tanto en el mediano asi como en el corto plazo.
“La semana pasada los Globales se movieron en sintonía a sus pares, aunque el factor idiosincrático jugó un rol considerable al final de la semana para que puedan cerrar con un leve incremento. Se consiguió dictamen para la Ley Bases, que se tratará hoy, lo que refleja señales de avances en la ejecución de tareas por parte de la administración actual”, detallaron.
Para Adrián Yarde Buller, estratega de Facimex Valores, las variables locales resultan clave para la dinámica de los bonos argentinos.
“La acumulación de reservas probablemente será el factor más importante para disipar el riesgo de default de corto plazo, por su efecto sobre la liquidez. El avance de la consolidación fiscal, por su impacto sobre la sostenibilidad de la deuda, y la popularidad del Gobierno, como señal de sostenibilidad social del camino elegido, serán otros 2 drivers de la compresión”, dijo.
Los analistas de Cohen explicaron que el futruo de la política monetaria de EEUU genera mayor presión sobre la deuda global.
“La expectativa de un recorte de tasas sigue corriendo para adelante (las mayores chances están en que las baje en septiembre) en tanto que los rendimientos de los bonos del Tesoro de EE. UU. siguieron en alza y tocaron los niveles más altos del año. La presión sobre los rendimientos de los bonos siguió afectando a la renta fija que tuvo una semana con ligera caída“, dijeron.
En ese sentido, agregaron que la atención en el mercado actualmente pasa por la parte legislativa.
“Todas las miradas estarán puestas en el Congreso debido al muy probable debate en el recinto de la nueva Ley de Bases que envió el gobierno, una condición para el Pacto de Mayo. Aunque el gobierno cree contar con los votos necesarios para su aprobación en la Cámara de Diputados, no se pueden descartar negociaciones de último momento y tensiones para asegurar su aprobación”, comentaron.
Finalmente, Maximiliano Bagilet, team líder de TSA Bursátil, se muestra optimista sobre la deuda local, aun a pesar de un contexto global más adverso.
“Creemos que todavía lo local está desacoplado de la coyuntura global y regional. El mercado sigue expectante al reordenamiento institucional, es decir, de la aprobación de la ley bases. La aprobación de esa ley va a ser el punto de partida para los activos argentinos, los cuales, hasta el momento solo descontaron el éxito de corto plazo en el plan macroeconómico, aunque con ciertas dudas en la sostenibilidad de este plan en el mediano plazo”, sostuvo.
Fuente El Cronista