Como todos los años a partir del 25 de abril hasta el 13 de mayo, abrió sus puertas la 48 Feria Internacional del Libro en su segunda semana de convocatoria.
Es un acontecimiento cultural con un escenario que convoca público en general, países visitantes y todo el universo literario que se nutre de escritores, autoras, editoriales, libreros, distribuidoras, bibliotecas, cursos de capacitación para profesionales, eventos, presentaciones de libros, firma de ejemplares, charlas, debates.
Implica un encuentro ineludible, impostergable cada año, más allá de toda connotación política, toda vez que los 45.000 metros cuadrados que ocupa la feria son únicos y exclusivos para vivenciar, disfrutar y compartir.
En el recorrido realizado desde TDP, surgen momentos, circunstancias, presentaciones de libros, autores, escritoras independientes, que sorprenden, son atractivos, interesantes y variados.
En tal contexto en el Stand 1722, de la Sociedad Argentinos de Escritores (SADE) observamos una escritora muy particular, Ileana Pilar Mombrú. Profesional que llevó adelante su carrera en la danza y actualmente su vocación como escritora.
En esta ocasión se está presentando en la feria con 3 de sus* libros Recuerdos Olvidados, Juguemos y Tacho. Mi vida de perro, Punto Aparte Ediciones.
Dialogamos con ella esencialmente para visibilizar y conocer esta apasionante historia de vida, porque en su transitar, experiencia, camino recorrido profesional, personal ha dejado y sigue dejando huellas, senderos, surcos. Mostrando un claro ejemplo y mensaje que su vocación e imaginación como escritora es inagotable sin importar la edad, paso del tiempo y barreras que puedan existir.
TDP- ¿Qué la lleva y/o motiva, además de su carrera en la danza, por su vocación de escritora?
IPM- Como hija y nieta de maestros siempre tuve ganas de aprender a leer y escribir. Por eso desde los 4 años y leía y a los 5 años, multiplicaba –por 2y3-, sumaba y restaba. De esta forma me pusieron en el colegio –en esa época – en primero superior. Toda la vida tuve una memoria realmente para destacar, no es un halago que me estoy haciendo ya que es algo natural que siempre exprese.
-Quería ser maestra pero me mandaron a comercial, quería aprender francés pero aprendí inglés, quería violín y me mandaron a piano, quería flamenco y me mandaron a danzas clásicas. Es decir siempre fue al contrario de lo que quería.
– Sin embargo, a los 14 años, “la cosa se puso bonita” y como tenía una vocación pronunciada para la danza clásica me dedique a eso. La vida me llevó a eso, a formar una familia, tener hijos, dedicarme a ellos. Inspire a mi marido para que siguiera estudiando y se recibió de profesor. Mientras tanto seguía enseñando danzas, hasta que en 2005 tuve un accidente feroz, no podía dar clases. Tampoco quería mostrar a mis alumnos que no podía hacer nada.
–Después de muchas consultas con mi almohada me decidí y escribí mi libro Cuentos Breves. Recuerdo de un reloj de arena, que salió a la luz dos años después. Se editó y presentó en la Editorial que estaba en Córdoba salió muy bien, tuvo buena acogida. En Córdoba, Capilla del Monte, se me ocurrió escribir Cartas desde la Capilla que no son de una capilla de iglesia sino desde el lugar, Capilla del Monte. Son cartas que nunca se han enviado.
–Por otro lado, lo que me motiva a escribir cuentos que son todos independientes, son cachos de vida que la gente lo puede haber vivido o haber imaginado
-Siempre digo: “Dame un granito de arena y te devolveré una playa”.
TDP- En cuanto a dos de sus libros, Juguemos y Recuerdos Olvidados, que llevó a la Feria ¿En que se basó o motivo?
IPM- Juguemos trata de los juegos tanto infantiles como para adultos, juegos de mesa familiar y se hace un paralelo con la vida real -por ejemplo- uno de ellos es juego que es la búsqueda del tesoro. Este juego es bastante significativo porque lo lleve a que todavía estamos buscando que pasa con Pompeya, y es el jugo del tesoro para los adultos que buscan a Pompeya.
-Relativo a Recuerdos Olvidados que lleve a la feria parece incongruente ya que si es un recuerdo como va estar olvidado, no obstante a veces sacamos de la galera, cuentos, historias y recuerdos que no teníamos.
TDP- ¿Qué la inspira en la historia de Tacho?
IPM- Tacho es un perro que recogen y por distintas circunstancias fue adquirido, soltado y abandonado, hasta que consigue estabilizarse y tiene nombre propio, una mamá dueña y toda su vida contada por él, desde que lo levantan que tiene meses, un cachorrito diminuto en la orilla del mar, hasta su adultez.
-Añade – Que el último libro escrito es La última ventana, es absolutamente e una mezcla de realidad, imaginación. Es un muchacho que toda la vida soñó con la casa antigua, ubicada en la zona de Flores.
TDP- ¿Tiene un nuevo proyecto o libro para salir próximamente?
IPM- En el libro que tiene la editorial para publicar, hay un cuento que finaliza el libro, llamado El Cochecito. Publicaron una foto de un cochecito cuna en una casa en ruinas, en el medio de lo que pudo haber sido un dormitorio o una sala. Es un derruido cochecito de bebe, cochecito cuna.
-Y todo lo que se me ocurrió de fantasioso alrededor de eso, es que un nene de 12 años descubre un cochecito desde las ruinas y se hace toda una historia en base a ese cochecito.
TDP ¿Qué le produce, significa o vivencia estar en la Feria Internacional del Libro?
IPM- Estar en la Feria Internacional del Libro, es estar en un mundo dentro de la fantasía que uno tiene. No es un mundo real. Es un mundo imaginado.
– Yo ahí me vi con mi maleta, con mis libros arrastrando en esa maleta frustraciones aciertos y mi divague que es más frondoso que los ingresos que me produce mi vocación, pero también es más placentero que lo que sería estar en un bote repleto de monedas y vacío de imaginación.
-Así que eso es lo que me produce estar en la feria, meterme en un mundo que mi madre diría: “El arte no da para comer”.
–Tampoco me produciría jugosos dividendos y mi vejez no será primorosa con los pasos de los años, pero me es imposible abandonar mi mundo de fantasía.
*Libros de Ileana Pilar Mombrú: Cuentos Breves. Recuerdos de un reloj de arena;
Cual Paleta de Pintor; Cartas desde la Capilla; Juguemos; Recuerdos Olvidados; Tacho. Mi vida de Perro, La última ventana. Ediciones www.puntoaparte.com.ar ; Instagram: @puntoaparte.ed
Fuente Periodico Tribuna