El presidente de la Conferencia Episcopal Española y arzobispo de Valladolid, Luis Argüello, se ha mostrado convencido de que «la raíz del asunto» de la rebelión de las clarisas de Belorado, «no tiene que ver ni con los inmuebles ni con lo económico; otra cosa es que el detonante de la situación final haya sido ese». Así se ha pronunciado este lunes en Valladolid tras la firma de un convenio de colaboración con la Diputación para la rehabilitación de iglesias y ermitas.
Argüello, que se ha mostrado reacio a hablar de un asunto sobre el que «la autoridad es del arzobispo de Burgos», ha insistido en que «por un edificio no se llega a negar el Concilio Vaticano II y todos los papas posteriores«, como han hecho las monjas. Sin embargo, ha apuntado, las 15 religiosas que se mantienen en el convento (una lo abandonó) «han hecho su propia profesión religiosa, con lo cual negar eso sería negar su propia existencia porque estarían diciendo que todo lo que han vivido es nulo».
Sobre Pablo de Rojas, el falso obispo creador de la Pía Unión de San Pablo Apóstol, el presidente de la CEE ha recordado con su excomunión por Mario Iceta, entonces obispo de Bilbao y actualmente arzobispo de Burgos, «se tomó una medida que explica algo de lo que está pasando». En este sentido, ha llamado la atención sobre esta «acción fuerte de la Iglesia» como lo demuestra que, por ejemplo, en Valladolid, no se ha producido nunca una excomunión . «La Iglesia tiene una llamada a acoger, es una comunidad de pecadores, no vienen a la Iglesia los santos, que no la necesitan, estamos los frágiles, pero, aún siendo así, hay un mínimo de mínimo y eso no puede ser», ha trasladado para explicar la gravedad de los actos que llevaron a la excomunión de Pablo de Rojas.
Argüello ha concluido que «lógicamente» se están estudiando más medidas con las clarisas de Belorado, «pero ahí la responsabilidad directa es del arzobispo de Burgos y de la Santa Sede». En este punto, ha explicado que «los monasterios dependen de una orden, tienen una autonomía grande y su responsabilidad es con la obispo, la abadesa y del Dicasterio de de la Vida Consagrada de Roma que son los que habrán que tomar las medidas de carácter canónico«. »El presidente de la conferencia episcopal no es el jefe de la Iglesia en España«, ha zanjado.
Fuente ABC