La llegada de Javier Milei al poder alteró por completo el mercado cambiario en la Argentina: tras la devaluación de diciembre, el dólar oficial se actualiza un 2% por mes de forma artificial a través de un crawling peg sin fecha de salida, mientras que aún están vigentes la mayoría de las restricciones cambiarias.
Además, el dólar blue se mantiene en niveles bajos contra una inflación que acumula un 101,6% en los primeros nueve meses del año, ya que, en el mismo período, la divisa paralela tan solo avanzó poco más de un 20%.
En este contexto de devaluación regulada, dólar “en calma” y mantenimiento del cepo, el analista financiero Salvador Di Stefano contempló el escenario cambiario, compartió sus recomendaciones inversión y analizó el mercado de créditos: qué opina
¿Endeudarse en dólares o en pesos? Qué piensa Salvador Di Stefano
En su último informe semanal, el analista advirtió por la toma de deuda en un contexto en el que “la alta tasa de interés en pesos que pagan las Lecap superan holgadamente la inflación y devaluación esperada a 12 meses”.
Con un crawling peg al 2% desde enero, se espera que la devaluación anualizada se consolide en torno al 26,8%. En contraste, “las tasas de las lecap se ubican en el 3,7% mensual”, lo que implica que las tasas positivas “son muy elevadas”.
En este escenario, las empresas que decidan endeudarse en pesos se enfrentarían a tasas en torno al 35%. “Si comparamos esta tasa con una devaluación que podría ubicarse en el 26,8% anual, esto nos dejaría una tasa en dólares del 11,4% anual”, calcula Di Stefano.
Por ende, para aquellos pensando en endeudarse, “hoy es más conveniente tomar un crédito en dólares a una tasa de un digito que un crédito en pesos a una tasa nominal del 35% anual”, aseveró el especialista.
Y agregó: “Está claro que con estas tasas que se ofertan en el mercado, a los agentes económicos les conviene tomar financiamiento en dólares o desahorrar dólares antes de endeudarse”. Los productores también podrían beneficiarse de “financiarse vía reducción de stock”.
Para Di Stefano, el blanqueo vigente facilitará el aumento de los depósitos en dólares y “aumentará el financiamiento en moneda estadounidense”, mientras que también “agregará oferta de billetes en el mercado de los dólares alternativos”.
En qué invertir con el “dólar muy bajo”, según Salvador Di Stefano
Con la expectativa de una mayor oferta de dólares en el mercado alternativo y una tasa de devaluación en desaceleración (Di Stefano calcula un ritmo del 21,8% anual para el dólar mayorista en 2025), el especialista compartió sus recomendaciones de inversión.
Para el titular de la consultora SDS, “con el dólar en niveles muy bajos, el atractivo de comprar bonos en pesos ajustado por inflación aumenta”.
“Hoy un bono como el TX26 rinde inflación más 11,0% anual, este bono paga una tasa del 2,0% anual. La amortización y renta se pagan en 5 cuotas mensuales y consecutivas a partir del 9 de noviembre del año 2024”, ejemplificó.
En contraste, el Bopreal serie 3 en dólares rinde el 11% anual con vencimientos similares. Con una inflación esperada del 26,8% total para el 2025 y una devaluación del 21,6% en el mismo período, es solo un ejemplo de como “el escenario es más favorable para los bonos en pesos ajustados por inflación que para los bonos en dólares”.
Esto se debe a que “el ingreso de dólares al país terminará planchando al tipo de cambio”. Sin embargo, cabe señalar que la inflación podría acelerarse por encima de los niveles esperados “por el ajuste de precios relativos de las tarifas públicas”.
En cuanto al tipo de cambio, Di Stefano ve “un escenario de dólar calmo hasta marzo del año 2025” ya que “se aleja el fantasma de la devaluación” gracias a los siguientes factores:
- La llegada de créditos de organismos financieros internacionales por u$s 4.000 millones;
- un repo con garantía de oro por u$s 3.000 millones;
- la llegada de más financiamiento corporativo que podría ascender a u$s 4.000 millones;
- y un probable acuerdo con el FMI con dinero fresco.
Este escenario “nos acerca a una probable salida del cepo e invita a invertir en bonos”, según el “Gurú”. Sin embargo, cree que este contexto también permite pensar en “incrementar la tenencia de acciones”.
Fuente El Cronista