Algo inusitado ha sucedido en la mágica tierra de la realeza británica: dos encapuchados lograron infiltrarse sin problemas en el castillo real. Y no, no estamos hablando de un episodio de “Misión Imposible”, sino de una historia digna de una comedia de enredos.
A grandes males, grandes soluciones. Total News decidió tomar cartas en el asunto y llevar a cabo una impactante investigación. ¡Y aquí te lo mostramos! Uno de los ladrones es nada menos que James Bond, y el otro, Mr. Bean, claro las capuchas impiden los distingas. ¡Sí, así como lo lees! Estos “agentes secretos” se lanzaron a una operación que, según ellos, tenía como objetivo demostrar que se debe invertir más en la seguridad de la casa real. ¡Qué gran servicio público!
Los criminales de cuerpo entero.
Según los informes, estos intrépidos “ladrones” entraron anoche en el castillo de Windsor, donde reside la nobleza, específicamente en Adelaide Cottage, hogar de los príncipes de Gales. Mientras tanto, Guillermo y Kate Middleton estaban disfrutando de una noche de sueño reparador junto a sus pequeños príncipes Jorge, Carlota y Luis. ¡Menuda sorpresa al despertar!
Los delincuentes, con planes dignos de una película de bajo presupuesto, saltaron la valla de la finca con la intención de robar maquinaria agrícola. Todo esto justo después de que las autoridades decidieran retirar la seguridad visible en las entradas públicas, probablemente para no asustar a los turistas que se quedaban boquiabiertos al ver a agentes armados, aparentemente, no solo la seguridad visible quitaron. Pero, ¡oh sorpresa! Aún hay patrullas policiales en los terrenos, aunque eso no pareció ser un impedimento para nuestros “cacos” del día.
Después de llevar a cabo su “gran golpe” en Windsor, donde, por cierto, no se encontraban los reyes Carlos III y Camila (quienes estaban muy ocupados en Escocia e India), los ladrones huyeron en una camioneta y un quad que habían sustraído, atravesando una de las puertas de seguridad, que quedó visiblemente dañada. ¡Un plan bien ejecutado, sin duda!
Testigos, que probablemente estaban más entretenidos que preocupados, afirmaron que los ladrones debieron haber vigilado el castillo antes de llevar a cabo su hazaña, eligiendo el momento perfecto para entrar y salir como si nada. “Debían saber que los vehículos estaban almacenados allí y cuál era el mejor momento para actuar”, comentaron, refiriéndose a la puerta que ahora necesita una reparación urgente.
La policía, con su habitual “tono “británico, confirmó los hechos: “Alrededor de las 11:45 p.m. del domingo 13 de octubre, recibimos un informe de robo en una propiedad del Crown Estate cerca de la A308 en Windsor. Los agresores entraron en la finca y se llevaron una camioneta Isuzu negra y un quad rojo. Luego se dirigieron hacia la zona de Old Windsor/Datchet. No se han realizado arrestos hasta el momento y hay una investigación en curso”.
Así que, querido lector, mientras la realeza se enfrenta a este nuevo desafío, nos queda una lección clara: ¡nunca subestimes el ingenio de un ladrón, especialmente si lleva el nombre de Bond!