La moneda de una peseta que se vende por más de 7.500 eurosEsta moneda con la cara de Franco alcanza precios de más de 100.000 euros en Wallapop
La peseta, la moneda que acompañó la vida de millones de españoles durante más de un siglo, es un símbolo de otra época y sigue siendo protagonista hoy en día, aunque de una forma distinta. Muchas personas guardaron billetes y monedas en cajones o álbumes familiares como recuerdo del pasado, sin imaginar que, años después, algunos de ellos podrían alcanzar cifras desorbitadas en el mercado del coleccionismo.
Según datos del Banco de España, más de 1.500 millones de euros en billetes y monedas de pesetas no fueron canjeados por euros antes de la fecha límite en 2021. Buena parte de este dinero se encuentra en manos de coleccionistas o, simplemente, olvidado en los hogares españoles. Para sorpresa de muchos, algunos de estos billetes y monedas, especialmente aquellos que destacan por su rareza, antigüedad o peculiaridades, se han convertido en piezas codiciadas cuyo valor puede alcanzar cifras insospechadas.
Pagan más de 100.000 euros por estos billetes de peseta que podrías tener por casa
El Confidencial
Los billetes de 100 pesetas son un claro ejemplo de esta tendencia. Durante décadas, fueron comunes en la economía cotidiana, pero ahora algunos ejemplares específicos han adquirido un valor histórico y económico que sorprende a los expertos en numismática. Estos billetes no solo representan el paso del tiempo, sino también una ventana a las historias y tradiciones de épocas pasadas.
El billete de 100 pesetas que puede valer hasta 12.000 euros
Entre los billetes de 100 pesetas más destacados se encuentra el emitido en 1875, una joya para los amantes del coleccionismo. Este ejemplar, que perteneció a la colección del Marqués de la Ensenada, cuenta con un diseño único que incluye alegorías de la ciencia y la industria. Su rareza lo convierte en uno de los más codiciados, con un precio de salida de 8.000 euros en subastas especializadas como las de Aureo & Calicó, y con la posibilidad de alcanzar hasta 12.000 euros.
Este billete, encapsulado para preservar su estado, se distingue por los grabados a buril en su anverso y su reverso tipográfico que refleja el meticuloso trabajo de la época. Además, fue fabricado en la Casa J. H. Sanders de Londres, y su circulación se extendió durante décadas, hasta que finalmente fue retirado en 1902. Su historia y excepcionalidad hacen que sea un verdadero objeto de deseo para los coleccionistas más exigentes.
Otros billetes de 100 pesetas también destacan en este segmento. Por ejemplo, el de 1876, emitido por la American Bank Note Company de Nueva York, con la figura de Lope de Vega y la inscripción ‘muestra’ en lugar de firmas oficiales, tiene un precio estimado de hasta 2.500 euros. De 1900, otro billete con la imagen de Quevedo, sin numeración ni firmas, podría alcanzar un valor similar.
Emitido en 1875, este ejemplar perteneció a la colección del Marqués de la Ensenada y tiene un precio de salida de 8.000 euros
Existen otros ejemplares que, aunque no alcanzan los 12.000 euros, siguen despertando gran interés. Por ejemplo, el billete de 1938, con la Dama de Elche, en perfecto estado de conservación, o el de 1953, con la imagen de Julio Romero de Torres, cuyo valor ronda los 500 euros. Incluso algunos billetes con errores de impresión o numeraciones curiosas pueden incrementar significativamente su precio en el mercado.
Fuente El Confidencial