El pasado miércoles 12 se dio a conocer el dato de inflación de Estados Unidos, que sorprendió al alza con una variación mensual de 0.5%, por encima del 0.4% esperado por el mercado. En términos interanuales, el avance de los precios asciende a 3%, un nivel no observado desde junio 2024.
En términos de los componentes, alimentos avanzó 0.4% en el mes, por encima del 0.3% de diciembre. Por el lado de energía ocurrió lo opuesto, ya que desaceleró de 1.1% desde 2.4%. El avance más significativo fue el transporte que se aceleró a 1.8% m/m (desde 0.5%), producto de un incremento en las pólizas de seguros (+2.0% vs 0.5% en diciembre). La inflación núcleo, que excluye alimentos y bebidas, se aceleró a 0.4% (se esperaba 0.3%) desde 0.2% en diciembre.
Los datos publicados resultan desalentadores ya que deja menos espacio a la FED para la baja de tasas. Por este motivo, durante la jornada bursátil del miércoles de la semana pasada se recalibraron las expectativas de recortes de tasa de interés a un solo recorte para 2025 (por 35 puntos básicos) y se vio afectado el mercado de acciones en general con una caída en el S&P del 0.3%.
La combinación de tasas reales atractivas y la necesidad de las empresas de financiar un sinnúmero de proyectos en la economía real, abren las puertas a los inversores minoristas a potenciar sus ahorros
Por su lado, las tasas de interés se incrementaron (cayeron los precios de los bonos) con la tasa a 2 y 10 años escalando 8.6 y 9.6pbs, respectivamente, hacia 4.37% y 4.63%. Por su parte, el jueves se dio la inflación mayorista, que también resultó ser de 0.4%, porcentaje por encima de lo esperado. No obstante, las ruedas subsiguientes volvieron a corregir a niveles previos a la publicación del dato.
En este contexto, la alta nominalidad obliga a buscar opciones para rentabilizar los dólares. Desde el plano local, cada semana se suman nuevas opciones para colocar dólares. Esto es motivado por el gran volumen de dólares en el sistema financiero producto del blanqueo de capitales y ayudado por los proyectos en curso en el marco del RIGI que implican grandes desembolsos de capital por parte de las empresas que adhirieron.
Puntualmente, Petroquímica Comodoro Rivadavia (PCR) emitió un nuevo bono corporativo en dólares a un plazo de 72 meses al 8% anual en dólares por un monto de u$s 65 millones (aunque recibió ofertas por u$s 79 millones) siendo una excelente alternativa para invertir en una empresa con ingresos diversificados en Argentina y Ecuador, lo que da respaldo a la acumulación de dólares para el pago de la deuda.
También se sumó al calendario de emisiones Camuzzi Gas Pampeana, compañía que desde el 2006 no tiene bonos cotizando en el mercado. Emitió bonos por u$s 70 millones, el máximo permitido por el prospecto al 7.95% anual en dólares con un bono a 24 meses. Vale mencionar que recibió ofertas por u$s 117 millones, muy por encima del monto objetivo.
Sin dudas, la combinación de tasas reales atractivas y la necesidad de las empresas de financiar un sinnúmero de proyectos en la economía real, abren las puertas a los inversores minoristas a potenciar sus ahorros.
Fuente El Cronista