El Senado provincial aprobó por amplia mayoría un proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo que modifica la Ley N° 8611, referida al Registro Provincial de Huellas Genéticas Digitalizadas.
El objetivo de la reforma es ampliar el uso de esta herramienta en investigaciones judiciales y en trámites administrativos, con el fin de facilitar la identificación de personas y el esclarecimiento de delitos.
La normativa incorpora dos nuevos incisos al artículo 6, que permiten la recolección de huellas genéticas en procedimientos policiales legalmente efectuados y en trámites administrativos ante organismos provinciales o nacionales. En ambos casos, se exige el consentimiento informado de la persona involucrada y el cumplimiento de los alcances que determine la reglamentación.
Desde el oficialismo, el senador Walther Marcolini, presidente de la comisión de Legislación y Asuntos Constitucionales, explicó que la modificación busca fortalecer el sistema de identificación a partir de perfiles genéticos obtenidos en escenas del crimen o de personas no identificadas. Señaló que el registro mendocino cuenta con más de 85.000 huellas genéticas, lo que lo convierte en el más grande de Latinoamérica, y destacó su tasa de éxito del 63%, que permitió esclarecer más de 1.400 causas judiciales.
La senadora Adriana Cano, jefa del bloque Justicialista, respaldó el proyecto, pero remarcó la importancia de las modificaciones introducidas al texto original aprobado en Diputados. Sostuvo que la versión inicial dejaba un margen muy amplio de actuación en los procedimientos administrativos y policiales, lo que podía afectar derechos individuales. Valoró que la nueva redacción se adecúa al marco normativo del Código Procesal Penal de Mendoza, y adelantó el voto afirmativo de su bloque.
En la misma línea se expresó el senador Ariel Pringles, del bloque de La Unión Mendocina, quien coincidió en que las modificaciones incorporadas fortalecen las garantías individuales sin limitar la eficacia de la herramienta. En tanto que el senador Dugar Chappel, del Partido Verde, expresó que se abstendría de votar el proyecto que se encontraba en discusión.
El cierre del debate estuvo a cargo de la senadora Natacha Eisenchlas, jefa del bloque radical, quien agradeció a los distintos bloques por sus aportes y por el trabajo conjunto que permitió mejorar el texto del proyecto. Aclaró que, si bien desde su espacio no consideraban que existiera riesgo de abuso o falta de institucionalidad en la versión original, entendieron la necesidad de explicitar ciertas garantías en el articulado para dejarlo más claro.
Con el aval de Senado, el proyecto fue aprobado y deberá regresar a la Cámara de Diputados para su segunda revisión, debido a las modificaciones incorporadas durante el tratamiento en el Senado. La aprobación de esta modificación se enmarca en una política sostenida de fortalecimiento del Registro, mediante inversiones en infraestructura, tecnología y capacitación del recurso humano, lo que ha permitido ampliar sus capacidades de forma estratégica y sostenida.
El Registro y los datos de interés
Desde su implementación, el Registro de Huellas Genéticas se ha consolidado como una herramienta fundamental en la política de seguridad y justicia de la provincia. Actualmente, cuenta con más de 85.000 perfiles genéticos, lo que lo convierte en el más grande de Latinoamérica. Su tasa de éxito alcanza el 63%, lo que significa que seis de cada diez evidencias ingresadas logran ser identificadas.
A partir de esta base de datos, se han producido 493 impactos identificatorios positivos, que permitieron esclarecer más de 1.400 causas judiciales, entre ellas 167 casos de abuso sexual, 158 robos agravados y 104 homicidios.
El impacto del Registro ha sido determinante en causas sensibles. Entre los casos más resonantes se encuentra la condena a Pablo José Antonio Navarro por múltiples abusos sexuales, la de Marcelo Escudero por delitos cometidos una década antes, y la de Marcos Leonardo Caballero, detenido por hurto, pero vinculado mediante huellas genéticas a un abuso ocurrido en 2014. También fue clave para identificar al asesino de Diego Mosca, gracias al análisis del material genético encontrado en la escena del crimen, y en los casos de Agustina Trigo y María Pía Persia.
Este artículo se publicó primero en Mendoza Today.
Fuente Mendoza Today