Ushuaia, 15 de julio de 2025 – Total News Agency-TNA-El gobierno de la provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur presentó reclamos diplomáticos ante las embajadas de España, China y Corea del Sur por la presencia de buques pesqueros de esas nacionalidades que habrían operado de manera ilegal en aguas jurisdiccionales argentinas, particularmente en cercanías del archipiélago de las Islas Malvinas.
La administración fueguina denunció que estas embarcaciones extranjeras ingresaron sin autorización del Estado argentino dentro de las 12 millas náuticas de las islas, lo que constituye una violación al derecho internacional y a la legislación vigente en materia de pesca. Según informaron fuentes provinciales, las maniobras detectadas no solo implican un saqueo de los recursos naturales, sino que también representan un respaldo económico indirecto a la presencia británica en el territorio ocupado.
“Además de explotar nuestros recursos naturales, están reforzando la posición del Reino Unido en Malvinas”, advirtió el secretario de Malvinas, Andrés Dachary, en declaraciones radiales. El funcionario subrayó la gravedad de la situación, al afirmar que las incursiones ilegales se realizan “con total impunidad” y, en muchos casos, sin una respuesta eficaz por parte del Gobierno nacional.
La información fue difundida por el medio local 19640 Noticias, que detalló que las denuncias alcanzan también a buques con bandera de Taiwán. A raíz de ello, el gobierno fueguino reiteró su adhesión al principio de “Una sola China”, y rechazó cualquier accionar que implique el reconocimiento de entidades separatistas.
Desde la provincia se considera que la operatoria de estas flotas extranjeras fortalece económicamente al enclave colonial británico en el Atlántico Sur, en detrimento de la soberanía argentina y de los intereses pesqueros nacionales. En ese sentido, las autoridades fueguinas insistieron en la necesidad de adoptar medidas concretas que garanticen la protección efectiva de los recursos marítimos y el cumplimiento irrestricto de las normas internacionales en materia de pesca.
Los reclamos provinciales se suman a una creciente preocupación por la continuidad de actividades ilegales en torno a las islas Malvinas, y reabren el debate sobre la eficacia de los controles y la respuesta diplomática frente a la persistente disputa por la soberanía del archipiélago.