Los radicales mendocinos se preparan para recibir mañana viernes 8 una visita de profundo calibre político e histórico para la UCR. El legendario dirigente Luis “Changui” Cáceres, una figura emblemática del alfonsinismo, encabezará un conversatorio en el que promete analizar y reflexionar sobre el futuro del centenario partido argentino. La cita está pautada para las 18:00 en la sede del Comité Provincia, ubicado en la calle Alem 241 de la capital mendocina.
El encuentro, que se desarrollará en formato de charla abierta, ha sido convocado con un título tan optimista como interpelante: “Lo mejor está por venir”. Esta frase, impresa en el flyer de la convocatoria, resuena con particular fuerza en el actual escenario político nacional, desde una perspectiva histórica.
La llegada de Cáceres se presenta como una oportunidad para que afiliados, simpatizantes y ciudadanos interesados escuchen y dialoguen con uno de los “arquitectos del radicalismo” de las últimas décadas. Su presencia -aseguran los organizaores- busca reavivar las bases doctrinarias y el fervor militante que caracterizaron a la generación que recuperó la democracia en 1983, un legado que hoy enfrenta nuevos y complejos desafíos.
¿Quién es Luis “Changui” Cáceres?
Nacido en Santa Fe de la Vera Cruz el 27 de julio de 1943, Luis Alberto Cáceres Elías es una figura ineludible para comprender la historia reciente de la UCR. Abogado de profesión, su vida ha estado indisolublemente ligada a la militancia política, destacándose por su rol como un organizador nato y un polemista de firmes convicciones.
Su trayectoria política comenzó a forjarse en la efervescencia de los años sesenta y setenta. Fue en 1968 cuando su nombre quedó grabado en la historia del partido como uno de los principales fundadores de la mítica Junta Coordinadora Nacional, un espacio juvenil que se convertiría en el motor del cambio dentro del radicalismo y en el semillero de una notable camada de dirigentes.
“Changui” y Alfonsín
Hablar del “Changui” Cáceres es hablar del “alfonsinismo” en su estado más puro. Fue un miembro clave del Movimiento de Renovación y Cambio, la línea interna liderada por Raúl Alfonsín que disputó y finalmente venció a las estructuras más conservadoras del partido. Su lealtad e identificación ideológica con el “padre de la democracia” moderna son absolutas.

La Junta Coordinadora Nacional, bajo el liderazgo de figuras como Cáceres, Enrique Nosiglia y Federico Storani, fue la fuerza de choque juvenil que impulsó la candidatura de Alfonsín en 1983. Con una ideología de centro-izquierda y una férrea defensa de los derechos humanos, movilizaron a miles de jóvenes, adoptando un programa de liberación nacional que rechazaba la violencia armada y promovía una transición pacífica hacia la democracia.
A lo largo de su carrera, Cáceres ocupó diversos cargos, entre ellos el de diputado de la Nación, donde su voz representó los ideales del alfonsinismo en el Congreso. En 1987, fue el candidato a gobernador de su provincia natal, Santa Fe, en una elección que, si bien no ganó, consolidó su liderazgo y su figura a nivel nacional.
Su rol trasciende los cargos electivos; es considerado un custodio de la herencia de Alfonsín. Una herencia que suele apelar al fortalecimiento de las instituciones republicanas y un Estado presente como garante de la educación y la salud pública, principios que continúa defendiendo con vehemencia.
La voz crítica del “Changui” y la Argentina actual
Lejos del retiro, “Changui” Cáceres se ha mantenido como una voz activa y crítica de la realidad social y política del país. En sus intervenciones públicas, suele lamentar el deterioro de las condiciones de vida, señalando con preocupación los altos índices de pobreza e indigencia que atraviesa la sociedad argentina.
En este contexto, sus opiniones sobre el gobierno del presidente Javier Milei han sido contundentes y claras. Cáceres no ha dudado en posicionarse en las antípodas ideológicas del actual mandatario, defendiendo las banderas históricas que, según él, el nuevo gobierno amenaza.
En una entrevista para un canal de YouTube en octubre de 2023, en plena campaña electoral, Cáceres calificó a Javier Milei como un “fascista totalitario”. En dicha oportunidad, argumentó su postura afirmando que el entonces candidato era “antirepública, antidemocrático, antipolítica” y que se regocijaba de estar “en contra de la educación pública, de la salud pública, de la investigación por parte del Estado”.
“Con Milei, ni a la esquina”
Esta postura quedó ratificada por el Movimiento Nacional de la Militancia Radical, que él lidera. La agrupación emitió un documento titulado “Con Milei, ni a la esquina”, dejando en claro la imposibilidad de un radicalismo de base alfonsinista de coincidir con el proyecto libertario. Según informó en su momento el portal Canal Abierto, el texto afirmaba: “Como radicales, jamás podríamos votar a Milei y sus propuestas totalitarias, antidemocráticas“.
Posteriormente, de cara al balotaje de noviembre de 2023, el diario Página/12 reportó que Cáceres fue uno de los más de 200 dirigentes radicales que rompieron la neutralidad formal del Comité Nacional del partido. Firmó una declaración pública en la que anunciaba su voto por el entonces candidato Sergio Massa, con el objetivo explícito de “derrotar al odio” y defender la convivencia democrática frente a la amenaza que, a su juicio, representaba Milei.
Desde su perspectiva, el rol de la Unión Cívica Radical hoy es precisamente recuperar su identidad y ser una oposición firme pero constructival. Un esfuerzo más para sacar a la UCR de su crisis actual y demostrar que el ideario de Alfonsín “no es una pieza de museo”, como han dicho sus detractores.
Este artículo se publicó primero en Mendoza Today.
Fuente Mendoza Today