El presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, ha asegurado que «en ningún momento» dio instrucciones a la ex consellera de Justicia e Interior Salomé Pradas ni a los técnicos sobre la gestión de la catastrófica DANA, con 229 muertos el pasado 29 de octubre. Tampoco participó «ni en la redacción ni en la autorización» del mensaje ES-Alert que llegó a los móviles de los ciudadanos de la provincia de Valencia a las 20.11 horas, y que centra la investigación judicial sobre la tragedia por considerarse «tardío» y «erróneo» en su contenido.
En una entrevista concedida este jueves, Día de la Comunidad Valenciana, a la televisión pública À Punt, Mazón ha indicado que la alerta no pudo llegar tarde porque no se podía avisar de algo que el Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi), el órgano que dirigía la crisis con Pradas al frente, no sabía que ocurría. «Cumplió su misión», ha sostenido, porque llegó cincuenta minutos antes de que la presa de Forata colapsara, algo que finalmente no ocurrió. En ese sentido, ha recalcado que el ES-Alert se envió ante la situación crítica de Forata y no por el desbordamiento del barranco del Poyo, el que provocó la mayoría de las muertes a su paso por la llamada “zona cero”.
Ha responsabilizado a la Confederación Hidrográfica del Júcar de no haber informado de ello —no remitió correos electrónicos durante dos horas y media—, si bien los datos del caudal estaban disponibles en su página web, y las llamadas al 112, el teléfono de Emergencias de la Generalitat, dieron cuenta de lo que ocurría minuto a minuto, aunque tampoco llegaron al Cecopi por causas que deberá esclarecer el procedimiento judicial.
Precisamente, Mazón no ha querido valorar la causa ni responder si aceptará o no en algún momento su ofrecimiento de declarar como investigado de forma voluntaria. Tampoco considera que sea momento de hablar sobre si se presentará o no a la reelección en 2027.
Cuestionado sobre si se arrepiente de su actuación, Mazón ha sostenido que no debería haberse «fiado» de la información que proporcionaba el Gobierno ni de las promesas de recursos, mientras se gestaba «un relato político muy dañino» contra él. También ha cargado duramente contra la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet): «Hemos tenido suerte porque ha avisado con antelación», ha afirmado, en referencia a la alerta roja anunciada para este viernes en el litoral sur de Alicante.
«No tenía pensado ir al Cecopi»
Durante la entrevista televisiva —una de las primeras tras la DANA y con respuestas muy extensas—, Mazón ha defendido su comida con una periodista en el restaurante El Ventorro de Valencia. Un almuerzo que se produjo cuando la situación ya era crítica en Utiel, por el desbordamiento del río Magro, con un desaparecido, una alerta roja vigente desde primera hora de la mañana y decenas de rescates en la comarca de la Ribera Alta.
«Mantuve la agenda porque se nos decía que venía una gota fría más», ha aseverado. «Estaba lloviendo dentro de lo esperable». Aseguró que estuvo «pendiente en todo momento» de la situación, pero «no para dar ninguna instrucción ni ninguna orden».
Además, ha recalcado que ningún presidente de la Generalitat «interfiere» en la gestión ni en las decisiones que los responsables de emergencias deben tomar, porque no es su «labor». Tampoco «es habitual» que el presidente acuda al Cecopi. De hecho, «no tenía pensado ir», pero se desplazó porque «a las nueve de la noche podía ser cuando Forata reventara».
Del restaurante —no ha precisado la hora, aunque la periodista afirmó que la comida había terminado a las 18.45— fue directo al Palau de la Generalitat, desde donde se dirigió al Cecopi. Llegó a las 20.28, como atestiguan las cámaras de seguridad, y no se puso a dirigir la reunión, ha aseverado.
Radiotelevisión Española (RTVE) emitió este jueves el audio inédito de un vídeo grabado como recurso periodístico durante la reunión que el presidente autonómico mantuvo el día de la DANA con los agentes sociales, antes del almuerzo en El Ventorro.
«Hay una primera alerta hidrológica en el pantano donde está…», se escucha decir a Mazón a las 13.45 horas. «Y en el Poyo he oído, ¿no?», le responde alguien. Unas alertas que se activaron a las 11.45 y a las 12.06, respectivamente, y que motivaron que se movilizara a los bomberos forestales. En ambos casos, el caudal descendió. Los efectivos que vigilaban el nivel del agua fueron retirados del Poyo alrededor de las 14.30, en otro asunto que aún está por esclarecer.
Fuente: ABC