El jefe de la comisaría platense a la que Carolina Píparo y su esposo, Juan Ignacio Buzali, fueron a denunciar la madrugada de Año Nuevo que habían sido asaltados por “morochorros” aseguró este miércoles que la mujer no contó que tras ese hecho habían atropellado a dos jóvenes, al declarar ante la fiscal del caso, quien esta noche escuchaba la versión de la legisladora provincial en los tribunales de la capital bonaerense
El abogado Rodolfo Baqué, quien representa a uno de los chicos embestidos, informó esta tarde a la prensa que unas de las testimoniales que tomó la fiscal María Eugenia Di Lorenzo fue la del subcomisario Julio Del Lago, quien está a cargo de la seccional 1ra. de La Plata.
“Le preguntamos al comisario si Píparo, por estar a cargo del área de Asistencia a las Víctimas (del municipio), le había preguntado cómo estaban las víctimas (atropelladas), si había llamado al SAME, o si comentó que había personas heridas, y dijo que no, que Píparo no le dijo nada de eso”, detalló el abogado en la puerta de la fiscalía, donde estuvo presente en la testimonial de Del Lago.
Baqué relató que el jefe policial explicó que llegó cerca de las 4 del 1 de enero a Plaza Moreno, donde finalmente se había detenido el automóvil que conducía Buzali y vio a la legisladora y al secretario de Seguridad municipal, Daniel Ganduglia, quien le presentó al abogado del marido de Píparo.
En la escena también estaban presentes varios motociclistas, amigos de los jóvenes atropellados, quienes habían seguido a Píparo y su esposo, para impedir su fuga.
“El comisario decide que todos deben ir a la seccional”, precisó Baqué.
Mientras que Martín De Vargas, abogado de otro joven atropellado por Buzali, contó que el jefe policial declaró que “Píparo y su esposo solicitaron la llave del baño de la comisaría, y entraron y salieron del baño cinco veces cada uno”.
“Contó que el abogado de Buzali los acompañaba cada vez que iban, que solicitaron un balde para limpiar, que Buzali se encargaba de la limpieza”, detalló.
Consultado si Del Lago declaró haber percibido olor alcohol en Píparo o su esposo, De Vargas precisó que “no, no dijo nada de eso pero sí que en el baño quedó un olor rancio, nauseabundo”.
Por su parte, Píparo arribó 17.15 a la sede de la fiscalía ubicada en calle 54, entre 6 y 7, de La Plata, acompañada de su abogado Fernando Burlando y adelantó que luego de declarar iba a atender a la prensa.
En tanto, fuentes de la investigación señalaron que la fiscal interrogaba a la legisladora solo sobre el robo que ella denunció previo al incidente vial y que, a su vez, decidió desdoblar el expediente en dos: una causa para cada hecho investigado.
Hasta el momento, la fiscal aún no adoptó ningún temperamento ni citó a declarar a Buzali ya que continúa recopilando elementos con el fin de determinar las circunstancias en las que embistió tras el asalto a dos jóvenes que iban en moto y que para la Justicia no tuvieron nada que ver con el hecho.
En declaraciones a Télam, Baqué precisó que tras embestir a la moto en la que se trasladaban dos jóvenes, “tres efectivos de la comisaría 1ra. declararon ante la DDI que el matrimonio fue a vomitar varias veces y que tenían fuerte olor a alcohol”.
“Si el personal policial, que es un tercero imparcial, dice que vomitaron es porque es así”, señaló.
El letrado manifestó que no requerirá un peritaje, como hizo su colega De Vargas, dado que “solo con esos testimonios alcanza” y analizó que si esa circunstancia se comprueba “agrega información a la tentativa de homicidio” que cree que cometió el marido de la legisladora provincial.
“Con una gran carga de adrenalina, miedo y alcohol, Píparo y Buzali quisieron atropellar a los que creyeron dos delincuentes armados. Ellos transfirieron muchas tensiones con ese acto”, consideró.
En tanto, De Vargas confirmó a Télam que requirió a la fiscal a través de un escrito “que se envíe a la policía científica a recabar los rastros” en la comisaría 1ra.
La legisladora y funcionaria del municipio platense deberá relatar lo ocurrido la madrugada del 1 de enero último, cuando fue asaltada en la calle 47, entre 15 y 16, en momentos en que iba con su esposo a llevar a su papá a su casa.
Según Píparo, seis “motochorros” la interceptaron y le robaron la cartelera con 20.000 pesos y su teléfono iPhone.
La mujer agregó que tras ello y cuando se dirigía con su esposo a realizar la denuncia a bordo de su Fiat 500L, volvieron a ser interceptados por los que creyeron que eran los mismos “motochorros” que los habían asaltado, por lo cual embistieron a una de las motos en las calles 31 y 28 y luego escaparon del lugar.
Por este hecho resultaron con heridas Luis Levalle (23) y un adolescente de 17 años, cuyos abogados pidieron que el esposo de Píparo sea detenido por considerar que intentó cometer un doble homicidio.