La Corte Suprema de Justicia retomará desde esta semana el análisis de expedientes de alto impacto político en el Gobierno, en un contexto de tensión con el kirchnerismo e intentará puntear un cronograma para consensuar una agenda de trabajo para los próximos acuerdos.
Tras el fallo dictado hace una semana, por el cual quedó firme una condena a dos de prisión contra la dirigente jujeña Milagro Sala por amenazas, la Corte volvió a enfrentar críticas del Gobierno.
Sin embargo, en la Corte Suprema buscan congelar los dardos oficialistas con la indiferencia. No creen que tengan por qué preocuparse.
Desde que el Gobierno lanzó hace diez meses una andanada de críticas al máximo tribunal y hasta armó un comité de expertos para cambiar su funcionamiento, la Corte Suprema no paró de firmar sentencias que impactaron en el oficialismo: la confirmación de las condenas de Amado Boudou y Sala, las sentencias por el primer juicio por la tragedia de Once o el duro fallo que obligó al gobernador Gildo Insfrán a abrir las fronteras y dejar entrar a unas 7000 personas que permanecían varadas en los límites provinciales.
Ahora, la Corte analiza si tratará una nueva causa ligada con Formosa a raíz del habeas corpusque planteó Juntos por el Cambio por las condiciones que atraviesan las personas que deben permanecer aisladas cuando entran a la provincia, donde, según dicen los denunciantes, se están produciendo violaciones de derechos humanos porque no están garantizados la salubridad, un ambiente sano, la salud física, la privacidad, intimidad, la circulación y el derecho a recibir un trato digno. La presentación la efectuó el senador opositor Luis Naidenoff.
Por esta causa, la justicia federal de Formosa dijo que el caso debía tramitarse en la justicia provincial; el asunto escaló hasta que la Cámara de Casación decidió lo contrario; Formosa apeló, y ahora debe decidir la Corte Suprema quién es competente, si la justicia federal o la local.
Pero en la consideración de la Corte está no solo el aspecto técnico de la competencia, sino el análisis global de la situación, si se tiene en cuenta que ya intervino en el asunto y reconvino al gobierno provincial.
El secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, fue a Formosa, admitió que hubo situaciones irregulares, pero terminó defendiendo a Insfrán. El gobierno provincial impuso restricciones para la libre circulación del periodismo, entre ellos, una periodista de La Nación que pretendió reportar la situación desde la provincia.
Las otras causas
Otro asunto que está en el radar de la Corte Suprema tiene que ver con otra causa en que Milagro Sala ya está condenada. Ya empezó a circular este expediente, por lo que es posible, si se reúnen los votos necesarios, que haya un fallo, aunque no a corto plazo.
La muerte del expresidente Carlos Menem trajo a la agenda la causa por el contrabando de armas a Perú y Ecuador. El caso por la absolución de Menem, que está en la Corte, quedó concluido con el fallecimiento del senador; sin embargo, el fallo dictado por la Cámara de Casación que había favorecido a Menem porque había transcurrido un plazo razonable para dictar sentencia, también benefició a una decena de personas más, cuya situación aún debe revisar la Corte.
En tanto, en el gobierno de la ciudad esperan que la Corte Suprema se aboque a estudiar los recursos que presentó por la decisión del gobierno nacional de quitarle fondos coparticipables.
Los jueces aguardan a que se cumplan los plazos establecidos en la ley para agotar la negociación política, y así avanzar con el análisis del caso.
Hay dos recursos presentados por el procurador de la Ciudad, Gabriel Astarloa, en los que pide declarar inconstitucional la ley y el decreto que dispusieron el recorte de los fondos.
Mañana, los magistrados puntearán con los secretarios de cada área los casos donde están en condiciones de fallar y analizan establecer una agenda de trabajo para los acuerdos sucesivos.