Crisis, inflación y las políticas de control de precios, fueron los componentes de un menú que introdujo fuertes cambios en el consumo. Mientras las grandes cadenas recuperan público y facturación, en febrero, las ventas en autoservicios y almacenes cayeron 13,2% en comparación con el mismo mes de 2020 y acumulan una baja del 8,1% en el primer bimestre del año. Según un informe de Scanntech, las categorías más golpeadas fueron alimentos y bebidas (13,7 y 13,9% respectivamente). “Las superficies más chicas son las más afectadas por la pérdida del consumo“, explica Darío Hernández, gerente de esa consultora.
Los datos ratifican una tendencia que se profundizó en los últimos meses: la búsqueda del precio más barato favorece a las grandes cadenas y sus propias marcas y perjudica a las tiendas de cercanía, los autoservicios, almacenes y tiendas de barrio. Según Nielsen, la venta en los súper aumentaron 13% y fueron los grandes ganadores en el mercado de artículos básicos. Los datos de Scanntech de febrero auguran otro mes complicado para el negocio de cercanía y cambios profundos en la relación del consumidor con las marcas. En 2021, según Scanntech, la caída del consumo se sintió más en almacenes (17,2%) y autoservicios (11,4%) y fue mucho menor en los súper independientes (4%).
Scanntech releva datos online de las cajas registradoras en 1.100 puntos de ventas de todo el país. En febrero, las categorías que más cayeron fueron lácteos (-15,6%), golosinas (-17,3%), aguas saborizadas (-29,7%), jugos en polvo (-25,4%), aguas (-21%), limpiadores (-19%), jabón en polvo (-30%), champú (-16,2%), desodorantes (-15,2%) y papel higienico (-14,7%). En ese canal, “las marcas líderes conservan el 52% de participación y el resto se lo reparten entre las segundas y terceras marcas”, enumeró Hernández.
La brújula del consumidor está en los precios. La razón es simple: los salarios en los últimos 12 meses acumulan una pérdida de 10,2% lo que representa un retroceso de 7,4% contra la inflación del mismo período. En este sentido, los controles del Gobierno (Precios Cuidados, Precios Máximos y Cortes Populares) “redirecciona el consumo hacia las grandes cadenas y le saca público a los negocios más chicos”, subraya Hernández. Eso ocurre porque es muy difícil de implementar y controlar esas políticas en un universo tan diverso y fragmentado como el de los almacenes, ferias y carnicerías barriales. “Ellos, por ejemplo, no acceden a los cortes populares de carne y eso beneficia a las cadenas. Es una consecuencia no buscada por el Gobierno, pero se produce”, añadió el experto.
Dentro del canal moderno (híper, súper y puntos de cercanía) también ocurren alteraciones, especialmente en el armado y abastecimiento de las góndolas. Las ventas de productos de las marcas propias (la gran apuesta de las cadenas líderes, como Carrefour, Día, Coto y el Walmart del grupo De Narváez) aumentaron 43% en 2020, con un rotundo salto de casi 155% en el mes de marzo, en el inicio de la primera cuarentena. El avance de los productos de su propio sello genera roces con los fabricantes de las marcas líderes. Desde Nielsen aseguran que las marcas líderes tienen una participación del 30% y las marcas propias ya promedian el 13%.
Desde Walmart consideran que los productos que llevan sus etiquetas (Great Value y Equate) abarcan cada vez más categorías de productos y son en promedio un 15% más baratos que las líderes. “En los últimos 4 años, las marcas propias pasaron de tener una participación del 12% al 19%. Pero la cuarentena y el congelamiento de precios produjo una gran dispersión hacia las líderes y las más baratas“, señaló una fuente de la cadena. “Las marcas de las grandes cadenas le quitan ventas a las líderes y eso es un fenómeno mundial“, agrega Fernando Aguirre, presidente de la FASA (Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios).
“La estrategia es poner en valor a las marcas propias y fortalecer todas las líneas”, dijo a Clarín Francisco Zoroza, ejecutivo de Carrefour. Siempre con la estrategia de ofrecer costos más accesibles que las líderes, la cadena francesa tiene hoy alrededor de 1.400 productos dentro de su portafolio de marcas, a las que apuntala con su campaña “Precios Corajudos”. Este miércoles, la compañía lanzó la 4° edición, con la promesa de mantener toda la canasta con precios congelados hasta el próximo 20 de junio.
Las modificaciones en los hábitos de consumo se potencian con la crisis y las políticas oficiales para contener la suba de precios. “En enero, el consumo en los súper creció 13%. Dentro del canal, perdieron participación las segundas y terceras marcas porque el consumo se polarizó“, grafica Javier González, de la consultora Nielsen. No obstante, señala que las marcas líderes comenzaron a recuperar terreno en el segundo semestre del año pasado “cuyos precios se hicieron más competitivos por las fuertes acciones promocionales“. añadió el especialista.
Con respecto a este año, González cree que dependerá mucho de lo que ocurra con Precios Máximos y las autorizaciones a los fabricantes para aumentar sus precios y la brecha que exista con las marcas propias de los supermercados. “Si eso no sucede y se repiten las promociones, es muy factible que saquen ventaja en función de la necesidad de resguardar el poder adquisitivo de los salarios”, analizó.
Fuente Clarin