Virginia se convirtió en el primer estado del sur de Estados Unidos en aprobar el uso personal de pequeñas cantidades de marihuana.
Según la nueva ley de Virginia aprobada por el Senado y la Cámara de Delegados, los adultos mayores de 21 años podrán poseer una onza o menos de marihuana a partir del 1 de julio. En un principio se había pensado en comenzar a aplicar la norma el 1 de enero de 2024, pero la fecha se modificó pese a las presiones de los republicanos que rechazaban la iniciativa.
El gobernador Ralph Northam, un demócrata, propuso adelantar la fecha, con el argumento de que sería un error de seguir penalizando a las personas por poseer una droga que pronto será legal.
En un comunicado, Northam expresó que Virginia “hizo historia como el primer estado en el sur en legalizar la posesión simple de marihuana“.
“Las leyes sobre marihuana fueron diseñadas explícitamente para perjudicar a las comunidades de color, y los virginianos negros tienen una probabilidad desproporcionada de ser detenidos, acusados y condenados”, afirmó.
En este contexto, Northam sostuvo que “Virginia tomó un paso importante para corregir esos males y restaurar la justicia a los perjudicados por décadas de sobrecriminalización”.
Varios distritos de Estados Unidos, como Nueva York o Colorado, han aprobado medidas similares, pero Virginia es el primero en hacerlo en la región del sur, social y políticamente conservadora.
Según la nueva legislación, los mayores de 21 años podrán poseer legalmente hasta una onza (28,3 gramos) de cannabis para uso personal, así como sembrar hasta cuatro plantas por hogar.
No obstante, la legislación aclara que el consumo de cannabis en público no será permitido.
Los permisos para producir y vender comercialmente cannabis no empezarán sino hasta el 1 de julio de 2024.
“La legalización acabará con miles de infracciones menores relacionadas con la marihuana que ocurren anualmente (…) finalizando con una práctica discriminatoria que demasiado frecuentemente atenta contra virginianos jóvenes, pobres y de color”, manifestó Jenn Michelle Pedini de la agrupación NORML, que aboga por la legalización de la marihuana en Estados Unidos.
Northam y otros demócratas propusieron la legalización de la marihuana como una forma de abordar los daños históricos de la guerra contra las drogas. Un estudio estatal encontró que los habitantes de Virginia negros tenían 3,5 veces más probabilidades de ser arrestados por cargos de posesión de marihuana en comparación con los blancos. Esas tendencias persistieron incluso después de que Virginia redujera las sanciones a una multa civil de 25 dólares.
Nueva York y Nueva Jersey también se enfocaron en abordar esos patrones cuando los gobernadores de esos estados firmaron leyes para legalizar la marihuana recreativa este año.
GRB
Fuente Clarin