Decisiones
Es martes a la noche y el Presidente de la Nación habla con un funcionario al que considera un amigo: “Es momento de tomar medidas. Y lo voy a hacer”, le dice con tono circunspecto. Lo hace desde su soledad de aislamiento por COVID en la Quinta de Olivos. El interlocutor de Alberto Ángel Fernández intenta justificar al primer mandatario ante este cronista: “Dicen que da vueltas para tomar decisiones y ahora, que toma medidas fuertes, lo critican”. Pero no todos en el Gabinete de Alberto coinciden en el modo en que se resolvieron los últimos anuncios, que eran desconocidos para los propios funcionarios hasta pocas horas antes de que se hicieran. “Con el último anuncio hicimos una cosa coral de todo el Gabinete hablando por los medios y comunicando, amigablemente, las nuevas medidas. Hoy, sale Alberto hablando él solo y suspendiendo las clases, para generarnos el enojo hasta de los que nos quieren y nos votan pero vuelven a tener a los chicos en sus casas como el año pasado”, rezonga una funcionaria que sufrió el desconcierto de la comunicación de las nuevas medidas.
Santiago Cafiero y Carla Vizzotti
El apuro en las nuevas restricciones en la circulación y la suspensión de clases lo padecieron también Santiago Cafiero y Carla Vizzotti. El jefe de Gabinete fue convocado por el Presidente a Olivos a comienzo de la tarde del miércoles. La ministra de Salud -que había arribado a Casa Rosada- tuvo que correr hasta la Residencia Presidencial y suspender toda su agenda, ante el llamado del Presidente. “Carla no sabía lo que se iba a anunciar”, reconocieron cerca de la titular de Salud. Cafiero y Vizzotti llegaron a Olivos ante la convocatoria urgente de Fernández y ambos, enancaron sus cejas cuando el Presidente les dijo que una de las decisiones era cerrar los colegios durante 15 días. La ministra había pedido, esa misma mañana ante los medios de comunicación, que “solo vayan a trabajar y a levar a los chicos al colegio”. El otro dañado fue Nicolás Trotta, titular de la cartera de Educación, quien no goza del derecho de picaporte telefónico del Presidente, esto es, que no tiene línea aceitada con Alberto. “Hay que cuidar a Carla”, suplicaba un ministro en la mañana de este jueves, cuando la funcionaria sanitaria intentaba rebobinar sus dichos y acomodarlos a la nueva realidad vigente -vía DNU- hasta el 30 de abril. Pero las sorpresas presidenciales no cesaron: al día siguiente de los anuncios, quien iba a salir por Radio 10 a hablar con Gato Sylvestre a defender las medidas era el jefe de Gabinete. Para sorpresa de varios, apareció por el teléfono Alberto Fernández, quien aprovechó para dar novedades no contempladas en los anuncios, como las partidas para los beneficiarios de la AUH, el cierre de los shoppings y una especie de disculpas para con los trabajadores de la salud. Pasillos on fire…
Alberto Fernández y Carla Vizzotti en una nueva reunión del Comité de Vacunación contra el coronavirus. Foto Presidencia de la Nacion
Al pizarrón
Pero no solo Vizzotti y Trotta quedaron pagando. La responsable de Educación de la provincia de Buenos Aires, Agustina Vila, había defendido ante los intendentes bonaerenses la continuidad de las clases, dando como dato estadístico que la tasa de contagio en los colegios secundarios era solo del 6%. Ante eso, el alcalde ultra K Mario Secco, le pidió poder cerrar él en Ensenada los colegios, lo que mereció una réplica de la funcionaria de confianza de Axel Kicillof, señalando que se debían tomar medidas en conjunto y no, de modo aislado. Horas después, Alberto habló largamente con Kicillof y de esa charla, surgieron las duras medidas restrictivas para todo el AMBA. Las consultas presidenciales fueron con el gobernador bonaerense y con Cristina Kirchner, quien estuvo al teléfono al tanto del cierre de establecimientos educativos. ¿Frente de Todos?
Agustina Vila, directora de Educación de la provincia de Buenos Aires. Foto Nievas
El salto del Pelado
Otro de los rezongos de varios habitantes de la Casa Rosada fue que se le regaló una vidriera a Horacio Rodríguez Larreta, con el tema de las clases y la promesa de presencia de fuerzas de seguridad en territorio porteño, “Lo dejamos lucirse y hacer el papel de bueno al más formado, estudioso e inteligente de toda la oposición”, bufaba un funcionario mientras miraba resignado la conferencia de prensa de Larreta, Pero más crudo era un intendente quien se esfuerza por defender a Alberto Fernández de las influencias del Instituto Patria: “Hicimos lo mismo en 2015, así lo hicieron presidente a Mauricio Macri, es el mismo camino. Lo inflaron y terminó ganándonos. Ahora, del mismo modo, vamos contra Larreta”, se lamentaba el alcalde quien se quejaba, a la vez, de que se estaba por quedar sin vacunas en su distrito. No ganan para disgustos…
Horacio Rodríguez Larreta.
Fuente Clarin