La soja superó el techo de los US$ 600 en Chicago el martes para la posición mayo y este miércoles cotizaba a $ 616,30 la tonelada en Chicago pasado el mediodía, en medio de una fuerte suba de los commodities en el mundo post pandemia.
Esto, además de ser una buena noticia para la macroeconomía argentina, abre la posibilidad para que los ahorristas e inversores que no están relacionados directamente con la actividad agroexportadora sumen una opción de inversión ganadora solamente al introducir algunos instrumentos en su cartera.
El precio de la oleaginosa aumentó más de 90% en los últimos doce meses y con la cotización de estos días se acerca al récord de US$ 650 la tonelada que registró en 2012.
“El precio de la soja, al igual que el de otros commodities, se fija en dólares. Por eso, presenta una relación inversa con esa divisa: cuando el dólar se fortalece, los precios de los commodities tienden a bajar y por el contrario, cuando se deprecia, los commodities suben”, explica Juan José Bano de Invertir On Line.
“Esto sucede porque cuando el dólar cae, los países dolarizados aumentan su demanda de productos, lo que genera una presión alcista sobre los mismos. El dólar se ha depreciado con respecto a las monedas en el último tiempo”, agrega y destaca que el factor climático y la demanda de China son otras dos razones detrás de esta fuerte suba.
Con los precios de esta semana, más de un inversor que aún no haya apostado por instrumentos del mercado de capitales relacionados con la actividad agrícola puede pensar que se quedó afuera de la ola alcista.
Pero para Gustavo Neffa, de Research For Traders, los commodities aún tienen margen de suba. “Si alguien invierte hoy en estos instrumentos, seguramente estará llegando tarde después del salto de los últimos meses, pero el precio de la soja aún tiene recorrido hacia arriba. Por lo que me parece que es una buena oportunidad para rebalancear la cartera y darle un buen lugar a los instrumentos asociados a los commodities“, dice el especialista.
“Si en una cartera conservadora, habitualmente se recomienda destinar entre un 10 y un 15% a los commodities agrícolas, en este momento, mi recomendación sería estirar este cupo hasta un 20% del portafolio“, detalla.
Desde el mercado local
Para el inversor minorista una de las principales opciones que ofrece el mercado de capitales local son los Fondos Comunes de Inversión (FCI) que invierten en una canasta de activos expuestos a la evolución del precio de la soja.
“Hay un FCI llamado Premier Commodities que tiene una exposición del 50% a futuros de soja negociados en el mercado local a través del Matba Rofex. También mantiene exposición en otros commodities como el oro, el petróleo y la minería de hierro a través de los Cedears”, señala Bano.
Este fondo rindió en 2020 más de 91% de ganancias. “El mínimo de inversión para este fondo es de $ 100”, destaca el analista.
Al mismo tiempo, la gestora de FCI de Banco Nación relanzó el año pasado el Fondo Pellegrini Agro, que también invierte en un canasta de futuros de soja y otros instrumentos de deuda local, como Letras del Tesoro y bonos. Durante 2020, las ganancias de este fondo fueron de 76%.
Las personas físicas que quieran invertir, primero deben solicitar una cuenta cuotapartista desde el home banking del Banco Nación, ingresando a Cuentas, Apertura de Cuentas y Cuenta Cuotapartistas. Se deben completar todos los campos y en aproximadamente 72 horas hábiles se habilita la misma.
Para suscribir, se debe ingresar desde el Home Banking, a Inversiones, Fondos Comunes de Inversión, Suscribir y seleccionar el fondo en el que desea suscribirse. Se pueden invertir desde $ 1000.
Una opción menos conservadora es apostar por acciones relacionadas con el campo. De los papeles que operan en la bolsa porteña, el único que tiene exposición directa al negocio de la soja es Cresud. En lo que va del año, esta acción registra subas cercanas al 60%.
Además, para un inversor más sofisticado, existe siempre la opción de operar futuros de soja en el Matba Rofex. Este mercado incluye una opción de contrato para minoristas que sigue directamente el precio de la soja en el mercado de Chicago.
En el exterior
Para aquellas personas que tienen una cuenta de ahorro e inversión más allá de las fronteras, las opciones se diversifican. “Tienen la opción de invertir en el ETF Soybean que sigue los precios en el mercado de futuros. También se puede apostar directamente por acciones que tienen exposición a este negocio, como el papel de Bunge“, explica Neffa.
El consultor agrega que “otra alternativa es apostar por el ETF del sector agrícola del Deutsche Bank, que sigue los precios del futuro de distintos productos agrícolas, como el maíz, trigo, soja y azúcar”.
NE
Fuente Clarin