Pese al ruido cambiario, el Banco Central ya compró en julio US$ 1.000 millones en el mercado oficial. Y aunque la brecha con el blue se disparó hasta casi el 88% en los últimos días, en el organismo que preside Miguel Pesce creen que las medidas anunciadas en el último fin de semana largo “van a tener efecto en el corto plazo”.
Había un diagnóstico común entre todos los jugadores del sistema financiero local: en el segundo semestre la “lluvia de dólares” del agro cesaría y las presiones cambiarias aumentarían. El Banco Central tomó nota y, tras haber comprado en junio en el mercado de cambios casi un 65% de dólares menos que en el mes anterior, buscó en julio anticiparse a las tormentas.
Y aún con un contexto de volatilidad externa y con mayores presiones en el mercado paralelo, con una brecha cambiaria que llegó este lunes a superar el 88%, la autoridad monetaria se las arregló para comprar en el mercado oficial otros US$ 60 millones, que se suman a los US$ 530 millones que había adquirido la semana pasada, luego de endurecer el acceso a los dólares financieros.
Así en lo que va del mes, ya compró US$ 970 millones, que se suman a los US$ 6.434 millones que había acumulado en la primera mitad del año y agrega poder de fuego para intentar apaciguar las presiones devaluatorias.
Sin embargo, en el mercado financiero y aún con una nueva batería de restricciones que limitan mucho la operatoria, el apetito por el dólar permanece alto: la brecha entre el dólar oficial y el blue saltó más de 20 puntos en dos meses y ya se ubica cercana al 88%.
Argentina no es un caso aislado. Este lunes el nerviosismo de los mercados internacionales ante el temor por una nueva ola de contagios del Covid 19 y su impacto de la economía local, elevó 0,2% el dólar Index, un índice que mide la relación de la moneda estadounidense dentro de una canasta de divisas, e hizo que los precios de las monedas emergentes cayeran. En Brasil. el real se devaluó casi 2%.
El humor internacional le pone un coto a la estrategia oficial. Y marca más la necesidad de acción en el mercado local. Los operadores de la City reportaron nuevamente fuertes intervenciones en el mercado de bonos, para mantener a raya al dólar MEP, que cerró en línea con el dólar solidario.
La brecha cambiaria, que se acerca al 90%, marca el ritmo. Sin embargo, en el Central aseguran que las medidas tomadas fueron atinadas y que no se están estudiando nuevas para frenar la demanda de dólares. “Es normal que se tarden algunas semanas en estabilizar”, dicen.
Mientras la autoridad monetaria se resiste a hacer uso de la tasa de política monetaria como una herramienta para recobrar el atractivo de las colocaciones en pesos, sí analiza intervenir en el mercado de bonos y sumar un mecanismo para prevenir volatilidades y asegurar liquidez. Sería una herramienta similar a un futuro de títulos públicos que le permitiría controlar sus intervenciones en este mercado.
“Se está analizando las características que tendrá el instrumento“, afirmaron fuentes del Central. “El mercado de títulos se vio afectado como consecuencia de medidas disruptivas que se tomaron en 2019. La reestructuración de las Lebac primero y la reprogramación de las Letes después provocaron un daño en el mercado de capitales”, recordaron.
“El mercado debe confiar en que el BCRA va a defender la curva de intereses, preservando la liquidez y evitando la volatilidad de los instrumentos del Tesoro. Hoy el BCRA interviene en la curva de rendimiento de los bonos en pesos. Y tiene una garantía de liquidez para los bancos que participan de las licitaciones del Tesoro. Ahora se está pensando en otros instrumentos que puedan ser utilizados por los fondos de inversión“, adelantaron.
Fuente Clarin