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Las inquietudes del campo frente al Gobierno son diversas, pero en torno a la asunción del nuevo ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez, que juró este lunes a la tarde, está claro que la prioridad es destrabar el cepo a las exportaciones de carne bovina, actualmente restringidas en un 50%.
Así lo expresaron referentes agropecuarios como Elbio Laucirica, presidente interino de Coninagro, el único de los 4 titulares de la Mesa de Enlace que participó del acto realizado en la Casa Rosada. El dirigente cooperativo dialogó con Dominguez y con Matías Kulfas (ministro de Desarrollo Productivo) para “reforzar la necesidad de que dejen sin efecto el cierre a las exportaciones de carne. Esperamos se resuelva favorablemente. Hoy perdemos todos! Necesitamos una señal”, declaró en redes sociales.
Y reflejó que también estuvo con el secretario general del gremio de los trabajadores de la industria de la carne, José Alberto Fantini, con quien compartimos con preocupación que con el cierre exportaciones de carne, pierden los productores y pierden los empleados de los frigoríficos!”.
En el mismo sentido, el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), destacó una “agenda de corto plazo”, encabezada por el “levantamiento de restricciones a la exportación de carne bovina”, aunque también pidió la “apertura de la discusión de la reducción paulatina de la carga tributaria para las economías pampeanas y la pronta eliminación de derechos de exportación para las economías regionales en aquellas posiciones arancelarias que aún están pendientes”.
En representación del CAA estuvo presente su vocero, José Martins, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, subrayó que “es imprescindible establecer un marco de reglas de juego claras, sostenibles en el tiempo, que nos pongan a resguardo de disrupciones, restricciones o prohibiciones en los procesos comerciales internos y/o flujos de exportación”.
Desde Federación Agraria, plantearon que “lo urgente, sin dudas, es que se pueda revertir la errada política aplicada en relación con las limitaciones de exportaciones ganaderas, para revertir las graves consecuencias que ésta tiene en los productores más chicos y en las economías regionales”.
Los federados “esperan que el ministro Domínguez pueda trabajar para dar respuesta a las necesidades de los productores genuinos, que luchamos en nuestros campos para seguir siéndolo, comprometidos con el desarrollo de nuestro país; que no podemos seguir viendo cómo nos dan la espalda quienes deben planificar las políticas públicas“.
En un sentido similar, desde el CAA promueven “un diálogo pleno pero conducente a logros concretos en favor de la producción, consumo y exportación de las cadenas agroindustriales. Alentamos que su gestión facilite el trabajo y la construcción público – privada de políticas de Estado que permitan la generación de empleo y expansión de nuestra bioeconomía”.
Y pusieron a disposición del ministro “los equipos técnicos y la agenda de temas que venimos trabajando, haciendo especial hincapié en la necesidad de avanzar en el envío al Congreso de la Nación del largamente discutido anteproyecto que fomenta inversiones en la actividad agroindustrial”.
Se manifestaron convencidos de que la Argentina tiene la “oportunidad de hacer crecer la producción primaria, cosa que permitirá mayor industrialización y agregado de valor, potenciando nuestras exportaciones y asegurando el abastecimiento del mercado interno, a la vez que reduce tensiones. Este círculo virtuoso impactará de forma positiva en un mayor ingreso de divisas y fundamentalmente en la creación de empleo federal e inclusivo”.
Fuente Clarin
