La campaña de inmunización contra el coronavirus para menores de entre 3 y 11 años, que comenzará el próximo martes en Argentina, tiene como principal objetivo “favorecer la inmunidad colectiva”
La jefa del servicio de Epidemiología e Infectología del Hospital Garrahan, Rosa Bologna, afirmó este jueves que “la vacunación del grupo de niños, niñas y adolescentes entre 6 y 17 años podría evitar unas 15.000 muertes”, un cálculo realizado en base a estudios de simulación de casos en función de la incidencia de la variante Delta del coronavirus en la población.
Bologna se basó en datos obtenidos por un programa computacional de simulación de casos, desarrollado por investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), que estimó el posible impacto de la vacunación pediátrica en un escenario de circulación comunitaria de la variante Delta en Argentina.
En ese sentido, precisó que de los resultados se arrojó que “la vacunación del grupo de niños, niñas y adolescentes entre 6 y 17 años podría evitar unas 15.000 muertes, principalmente por disminución de infección intra hogar, de adultos mayores de 60 años, a partir de convivientes no vacunados”.
A su vez, reparó en que la inmunización de menores “podría evitar alrededor de una internación cada 2.000 vacunados en cada grupo etario”.
La especialista consideró que la campaña de inmunización contra el coronavirus para menores de entre 3 y 11 años, que comenzará el próximo martes en Argentina, tiene como principal objetivo “favorecer la inmunidad colectiva”.
En diálogo con la Televisión pública, la médica expresó que “estamos contentos con la incorporación e inicio de la vacunación en niños”.
Bologna afirmó que la vacunación es importante para “prevenir las infecciones en los niños, niñas y adolescentes, porque si bien las complicaciones en este grupo etario son bajas, en los niños con comorbilidades y los que son inmunocompetentes existe el riesgo del síndrome inflamatorio multisistémico”.
Al respecto señaló que se trata de “un cuadro que aparece después de la infección, y acarrea el peligro de que tengan que ser asistidos en la unidad de cuidados intensivos”.
Además, indicó que como en los adultos, en el caso de los niños y adolescentes puede aparecer “el Covid prolongado”, con la persistencia de síntomas meses después de cursar la enfermedad.
Fuente Telam