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Rusia apoya a su aliado Bielorrusia en la crisis fronteriza con Polonia, pero no desabastecerá de gas a Europa. Foto: NA.
A la crisis energética que está padeciendo Europa, altamente dependiente del abastecimiento del gas ruso, no pudo caerle peor la amenaza del presidente bielorruso, Alexander Lukashenko, sobre un bloqueo a estos envíos si la Unión Europea (UE) impone nuevas sanciones contra Minsk, por la acusación de que utilizan a los migrantes para lanzar un “ataque híbrido” contra sus fronteras en Polonia y Lituania.
Si bien la presidencia de Rusia aseguró que el país seguirá cumpliendo con sus compromisos de suministrar gas al Viejo Continente pese a las amenazas de Alexander Lukashenko, la tensión en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, mantiene latente la inquietud por eventuales represalias mutuas.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, se había desplazado de manera urgente a Varsovia para “expresar toda la solidaridad de la UE” con Polonia ante la agresión del régimen de Lukashenko, que en las últimas horas se agravó con la retención de 60 personas que lograron cruzar la frontera hacia territorio polaco.
Hasta la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, criticó, en una rueda de prensa durante su visita a Francia, las “preocupantes actividades” llevadas a cabo por el presidente bielorruso. Manifestó que la Administración del presidente Joe Biden se encuentra “preocupada” por el asunto y confirmó que está siendo abordado con el presidente de Francia, Emmanuel Macron.
A la vez, el viceministro de Exteriores de Polonia, Marcin Przydacz, amenazó con cerrar un mayor número de pasos fronterizos, como ya lo hicieran en la zona de Kuznica a comienzos de semana. Su explicación para ello fue que “los analistas de Minsk y los representantes de las agencias económicas y diplomáticas entendieron y entienden esta situación”.
Miles de migrantes, en su mayoría procedentes de Irak y otros países de Cercano Oriente, intentaron cruzar la frontera bielorrusa a lo largo de este año para entrar en territorio de la UE. Ante ello, Lukashenko, que ya había sido sancionado por Bruselas en relación con las polémicas elecciones celebradas en agosto de 2020, advirtió que su país no detendrá el flujo de migrantes.
La respuesta de las autoridades de Polonia fue declarar el estado de emergencia en los territorios fronterizos y desplegar al Ejército en la zona. “Un paso fronterizo está cerrado, si del otro lado no entran en razón, es posible que sigamos adelante”, declaró Przydacz a la emisora polaca Radio Canal 3.
Como contrapartida, Rusia y Bielorrusia anunciaron la realización de una serie de ejercicios de “preparación para el combate”, lo que llevó al despliegue de paracaidistas en el país vecino. Minsk aseguró, no obstante, que las maniobras se deben al aumento de la actividad militar en su frontera.
Fuente Diario 26