Por Milagros Boyer
Sin contemplaciones, Borges cargó contra la cúpula que rodea al opositor Juan Guaidó y explicó que “hay que reformar el Gobierno Interino, que tenía sentido para salir de la dictadura pero se ha deformado y, en lugar de ser un instrumento para luchar contra la dictadura es un fin en sí mismo”.
El dirigente opositor Julio Borges, quien se desempeñaba como comisionado presidencial para las Relaciones Exteriores del Gobierno interino de Juan Guaidó, anunció este domingo que renunciará a su cargo. Al respecto argumentó que esta decisión surge luego de ver cómo el gobierno interino se ha deformado durante los últimos tres años, por lo que considera “tiene que desaparecer completamente”.
En una rueda de prensa que ofreció por Zoom, el otrora diputado de la Asamblea Nacional indicó que “voy a dejar el cargo que he tenido hasta ahora para dar está lucha de desmantelar y transformar las cosas para volver a construir un proyecto, un camino y una unidad”.
Sin contemplaciones, Borges cargó contra la cúpula que rodea al opositor Juan Guaidó. En tal sentido, explicó que “hay que reformar el Gobierno Interino, que tenía sentido para salir de la dictadura pero se ha deformado y, en lugar de ser un instrumento para luchar contra la dictadura es un fin en sí mismo”.
Asimismo, el abogado que también forma parte del partido Primero Justicia, una de las cuatro toldas políticas que fungen como base para sostener el Gobierno interino, agregó que esta institución se ha transformado en “una casta que se ha burocratizado’.
“La noción de gobierno interino tiene que desaparecer. No podemos seguir con una burocracia de casi 1600 personas. El gobierno interino ya quiere perpetuarse”, afirmó.
Los escándalos de corrupción que marcan al interinato
El político no escatimó en justificar la razón de su dimisión, ni tampoco el porqué de sus señalamientos tan incisivos frente la cantidad de «tropezones» que ha tenido el interinato, los cuales han sido percibidos tanto puertas adentro, como también por la sociedad civil que demostró con su apatía ante las propuestas opositoras por medio de una abstención que rozó el 60% en los comicios electorales del 21 de noviembre.
“Perdimos apoyo internacional porque han habido demasiados errores y escándalos. Pusieron nuestro caso en la nevera. Necesitamos un espacio interno de movilización de lucha, de los partidos y la sociedad civil, y Hay que acumular la fuerza para tener legitimidad dentro y fuera”.
Asimismo, el opositor interpeló directamente a Juan Guaidó: “No puede pensar en vegetar en una posición, tenemos que sacudir y reconstruir el espacio de unidad. Confío en que haya sensatez”.
Fuente Panampost