La vida de Manuel Peláez quedó marcada para siempre el 21 de junio de 1971, con solo 14 años. Ese día, su padre, un guardia civil destinado en una modesta casa cuartel de Zamora, murió de un infarto fulminante. La familia quedó en una situación económica muy precaria y la única salida posible para el chico era ingresar en el Colegio de Guardias Jóvenes de Valdemoro (Madrid). Había un problema; no cumplía los 15, edad mínima para poder ingresar, hasta el 27 de diciembre. Se tuvo que pedir una gracia especial para que fuera admitido –de lo contrario hubiera perdido un año, con lo que eso suponía de penosidad añadida para la familia– y hubo suerte; la respuesta fue afirmativa…… Ver Más
Fuente ABC