“Fomentamos la vacunación, pedimos el pase sanitario, tenemos apoyo del ministerio de salud de la provincia. Los eventos formalizados, estructurados con producción y serios, colaboran con el proceso de vacunación en jóvenes. Recibimos muchas consultas de nuestro público y colaboramos en la concientización. Las fiestas, de todos modos, sucederían, serían clandestinas si las prohibieran, los pibes se van a juntar con Mar del Plata llena de veraneantes”, se sincera Gambini.
En la programación de MUTE, donde hace años tienen lugar las fiestas electrónicas en Mar del Plata, este verano habrá más de 20 shows que incluyen al DJ holandés Eelke Kleijn, luego Solomun, Claptone, Nick Warren, John Digweed, Babasónicos y más artistas de rock y pop, la Fiesta Bresh, entre otros. Conversamos con Gambini.
Periodista: ¿Cómo operan los NFT para shows masivos?
Ariel Gambini: Quisimos innovar en MUTE para generar nuevos canales de contacto con los usuarios a través de la tecnología. Al estar también con el negocio de la minería y bitcoines, ideamos contratos inteligentes a partir del interés que hay por las propuestas inmersivas con los shows de temporada. Nos propusimos que los NFT fueran una herramienta nueva de acceso a una experiencia única e irrepetible que habilitara a vivir un show de un artista de forma integral. Ese NFT a su vez tiene valor en subasta y pueden ser revendidos ahora o en años posteriores. Vamos a lanzar en subasta entre nuestro público que es muy activo en redes, cerca de un millón de visitantes únicos en Instagram, y veremos cómo nos va.
P.: ¿Cómo será esa experiencia única de la que habla?
A.G.: Tendrán acceso y trato únicos, serán buscados por hosts, los esperarán y recibirán con estacionamiento VIP, acceso al backstage, cabina y todas las instalaciones, momentos con el artista, fotos exclusivas. Vivirán el show con un nivel superior a las mesas más caras.
P.: ¿Qué protocolos covid tienen en cuenta para espectáculos masivos?
A.G.: Es una playa de ocho hectáreas, vivimos con mucho viento, no hay más aire libre posible, todo nuestro personal en barras, baños, mesas usan barbijo, hicimos una campaña interna que incentiva a la vacunación del personal, pediremos el pase sanitario como exige el Gobierno de la Provincia. Además fuimos el primer espacio de entretenimiento que sacó una comunicación sobre vacunación alentando a hacerlo, de hecho tendremos postas de vacunación para colaborar con la concientización, sobre todo en jóvenes.
P.: Si bien hay buen nivel de reservas hoteleras y de carpas, ¿qué dice el sector respecto al rebrote?
A.G.: Somos parte de varias cámaras vinculadas con el entretenimiento y lo gastronómico, estuve muy activo en la cuarentena y estoy en contacto con dueños de espacios y por ahora, con datos del municipio, provincia y Ciudad de Buenos Aires se habla de baja ocupación de camas en terapia intensiva porque no hay casos graves. Hay 5% de ocupación de camas y en el sector privado de Mar del Plata 100 internados de 1.200 camas. Todo lo que se hizo a nivel salud nos permite estar tranquilos si se sigue así. Además en la previa de Navidad y Año Nuevo crecieron los casos como el año pasado y después la curva cayó porque la gente se estabiliza. Espero pase lo mismo. Está llegando gente a Mar del Plata pero somos cautos, Argentina lleva a ser cautos.
P.: ¿Cómo se transformó el lugar que antiguamente era un balneario tradicional en este espacio multipropósito?
A.G.: Se fue convirtiendo en este multiespacio masivo de temporada que hace convivir la playa con la familia con chicos y los shows masivos. Lo más complejo es producir en arena, aunque parezca fácil. Junto con el Lollapalooza somos lo más grande en un solo escenario. Porque hay actividad a la noche, al otro día hay que levantar y limpiar todo para colocar las carpas, luego el after beach, una fiesta. Es una cosa atrás de la obra durante 40 o 50 días, sin pausa.
P.: ¿Como sobrevivieron a la pandemia?
A.G.: El año pasado hicimos burbujas sociales con corralitos, y se armaba todo de ese modo, no se ganó dinero pero se pudo sostener, cubrir el equipo y dar trabajo. Ahora la gente volvió a salir, a los restaurants, y noto que prima la experiencia social. Si bien hay muchos artistas importantes que venden tickets, lo social es lo primordial, por ejemplo la fiesta electrónica, cambió en términos de público. Hoy es un evento social y viene gente que no escuchaba música electrónica. Es gente tal vez que viajaba mucho al exterior y como por covid se queda, quiere consumir productos de calidad y mejor nivel. La gente está desesperada por hacer cosas.