Por Annabella Quiroga
Para marzo, los economistas privados proyectan un alza del índice de precios de hasta el 5,7%.
Hace siete días el presidente Alberto Fernández le declaró la guerra a la inflación. En esa misma semana, los precios de los alimentos dieron un salto del 4%, anticipándose a los controles que presumiblemente aplicaría el gobierno para evitar la escalada.
Según el relevamiento de la consultora EcoGo, encabezada por la economista Marina Dal Poggetto, los precios de los alimentos treparon 4% en la tercera semana de marzo. El avance fue fuerte: hasta ese momento el salto más marcado se había producido en la segunda semana de este mes, con un incremento del 1,9%.
“La guerra contra la inflación aún no comenzó y el gobierno ya parece haber perdido la primera batalla“, planteó la consultora.
Con este dato y considerando una proyección del 0,2% para la última semana del mes, la inflación de alimentos consumidos en el hogar en marzo treparía a 5,4% mensual, según EcoGo.
Esto lleva a la proyección de EcoGo de inflación para este mes al 5,7%. Este número se explica por el fuerte aumento en los regulados –gas (22%), luz (22%), prepagas (6%), educación (18%), combustibles (10,3% en promedio)- y “por la expectativa de nuevas medidas de control de precios. A esto se le suma el impacto del conflicto Ucrania-Rusia que no solo afecta de forma directa el precio de insumos claves como el de los combustibles y los granos, sino que además plantea un panorama incierto”.
Con un pronóstico más cauteloso, la consultora LCG estimó que en la tercera semana de marzo “la suba de precios de los alimentos promedió 2,44%, acelerando 0,86 puntos porcentuales respecto la semana anterior”. De este modo, el índice de alimentos y bebidas presentó una inflación mensual de 4,6% promedio en las últimas 4 semanas y 5,9% punta a punta en el mismo periodo.https://datawrapper.dwcdn.net/mYnTy/1/
En esta medición, las subas más marcadas de la tercera semana fueron las de bebidas e infusiones para consumir en el hogar (4,5%), seguidas de panificados, cereales y pastas (3,8%), aceites (3,6%) y verduras (3,1%).
En Ecolatina calculan una inflación intermensual superior al 5,5%. “Por un lado hay importantes aumentos estacionales (indumentaria y colegios) pero la aceleración inflacionaria está generalizada. El core -la inflación núcleo, un indicador que no tiene en cuenta las variaciones de los precios estacionales y de los regulados- se ubica en torno a 5%”, señaló el economista Federico Moll.
“La inflación viene subiendo, sobre todo en la última semana. Los alimentos están subiendo mucho, especialmente, los derivados del trigo. El mes apunta a 5% o más. Y a esto se suma a prepagas, combustibles, gas, electricidad y ropa por el cambio la temporada”, apuntó Camilo Tiscornia, de la consultora C&T.
Para la consultora FMyA, la inflación de marzo será del 5,2%. “El Gobierno subió retenciones para ‘desacoplar’ subas del mercado internacional del mercado local. Ahora nuevamente va por ‘acuerdo de precios y salarios’, un fracaso cantado si el orden macro con el FMI (a nivel fiscal y monetario) no hace bajar las expectativas de inflación”, postula el economista Fernando Marull.
Esta vez el gobierno parece apostar al acuerdo forzoso. En la tarde del lunes, en una conferencia de prensa el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, admitió que el grueso de los aumentos de precios en el sector alimentos se dieron a partir del 8 de marzo. Y emplazó a las empresas a que en 24 horas justifiquen los aumentos de precios o los retrotraigan a los primeros días del mes.
Con la amenaza de recurrir a la Ley de Abastecimiento si no hay acuerdo con las empresas, Kulfas detalló que en los últimos días detectaron “alzas de 10%, 15% y hasta 20% en los alimentos”.
El ministro confirmó que se implementará un fondo estabilizador del precio del trigo -alimentado por las mayores retenciones a los exportadores de harina y aceite de soja- que compensará a los molineros por el aumento del precio de la harina a partir de la guerra en Ucrania. Con esto se buscará que las panadería retrotraigan el precio del pan a los valores de febrero.
Además Kulfas anticipó que están trabajando en un fondo similar para contener las subas de las frutas y las verduras. “Tenemos una gran preocupación de productos frescos; estamos trabajando con el Mercado Central para crear algún fondo estabilizador.
Desde La COPAL, la entidad que agrupa a las grandes productoras de alimentos, marcaron que desde el inicio de la pandemia en marzo del 2020, el incremento de precios fue mucho más alto en los productos frescos que en los envasados. En ese relevamiento el tomate lidera las alzas con un salto del 276%, seguido por la lechuga (243%) y el asado (187%). En cambio, entre los envasados, el salto más fuerte fue el de la yerba mate (108%), junto con aceite de girasol (107%) y el arroz blanco 78%.
Los analistas descreen de la efectividad de las medidas a las que recurre el gobierno. “El timing no podría ser peor, en las vísperas de discusiones salariales importantes la aceleración inflacionaria cambia las expectativas de los agentes y esto se traduce en paritarias más altas que le ponen un piso elevado a la inflación futura”, sostuvo Federico Moll.
AQ
Fuente Clarin