
El mandatario reveló que su administración ya suministró a Ucrania diez sistemas de armas antitanque por cada tanque que Rusia envió al país.
“Necesitamos este paquete para ayudar a Ucrania a luchar por su libertad”, manifestó. “El costo de esta lucha no es barato, pero ceder a la agresión va a ser más caro si lo permitimos”, añadió el mandatario estadounidense, que reiteró que Estados Unidos no tiene previsto enviar efectivos a Ucrania.
“Nuestros aliados de la OTAN, nuestros socios de la UE, también van a pagar su parte, pero nosotros tenemos que hacer lo que nos corresponde para liderar la alianza”, dijo.
De los 33.000 millones de dólares, 20.400 serían destinados a proporcionar a Kiev ayuda militar y en materia de seguridad, que se sumarán a suministros por más de 5.000 millones ya entregados. En tanto, 8.500 millones irían a parar al Gobierno ucraniano y 3.000 millones serían para asistencia humanitaria adicional.
El paquete propuesto también incluye financiamiento para abordar las perturbaciones económicas en Estados Unidos y otros lugares, que van desde el impacto en el suministro de alimentos hasta la disponibilidad de componentes críticos utilizados en la fabricación de alta tecnología.
“La solicitud de financiación del presidente es lo que creemos que se necesita para permitir el éxito de Ucrania durante los próximos cinco meses de esta guerra. Y tenemos todas las expectativas de que nuestros socios y aliados, en particular los del G7, así como muchos otros países, continúen brindando niveles comparables de asistencia”, dijo el alto responsable, que habló bajo condición de anonimato.
Aunque tanto los republicanos como el Partido Demócrata de Biden señalaron que desean seguir respaldando a Ucrania, una disputa sobre el pedido de miles de millones de dólares en nuevos fondos para afrontar la pandemia de covid, no relacionada con el tema de la guerra, amenaza con complicar el proceso de aprobación legislativa.
Después de que Rusia le cortara el miércoles el gas a Polonia y Bulgaria por no pagar el suministro en rublos, tal como había exigido Putin, Biden señaló que Estados Unidos no permitirá que Moscú use el “chantaje del gas” para presionar a los aliados europeos y socavar las sanciones impuestas a Moscú por su invasión a Ucrania.
“No permitiremos que Rusia intimide o chantajee para eludir estas sanciones. No permitiremos que use su petróleo y gas para evitar las consecuencias de su agresión”, afirmó Biden.
La medida rusa, que llegó un día después de que Estados Unidos y otros países occidentales prometieran acelerar el suministro de armas a Kiev, incluso material pesado a gran escala (ver nota aparte), también fue tildada de “chantaje” por parte de la Unión Europea (UE), mientras que el Kremlin aseguró que fue en respuesta a las sanciones que le impusieron por la invasión de Ucrania.
El jefe de la Casa Blanca cuestionó asimismo al Kremlin por hacer afirmaciones “ociosas” e “irresponsables” sobre el posible uso de armas nucleares en el conflicto de Ucrania, y dijo que esas aseveraciones mostraban “desesperación”.
Confiscaciones
Dentro de la propuesta que enviará al Congreso, Biden incluyó el pedido de nuevos poderes para incautar y reutilizar bienes de empresarios rusos cercanos al Kremlin para compensar a Ucrania por los daños causados por la invasión de Rusia, informó la Casa Blanca.
La liquidación de los bienes confiscados a los empresarios rusos permitiría “transferir” a Kiev las ganancias generadas para “remediar los daños (causados a Ucrania) por la invasión rusa”, adelantó la Casa Blanca.
Biden propone además a la Cámara de Representantes y el Senado una reforma que convierta en delito penal que una persona “posea a sabiendas o intencionalmente ganancias obtenidas directamente de tratos corruptos con el gobierno ruso”.
Fuente Ambito