La divisa informal retrocedió seis pesos en el día, mientras que mantiene una ganancia de 11 pesos o 5,3% en el transcurso de junio
El precio del dólar estadounidense en el mercado informal batió este martes un nuevo máximo, un alza ligada a la desconfianza de los inversores respecto al peso argentino y los activos nominados en la moneda local.
La divisa estadounidense subió este martes 8 pesos en el mercado paralelo, hasta un nuevo máximo de 224 pesos, para superarla anterior marca de 222,50 pesos que se había registrado en enero último.
En tanto, en una sesión con USD 269,6 millones en el segmento de contado (spot), el dólar mayorista ganó 20 centavos, a $122,70, con una brecha cambiaria de 76,9% respecto del dólar “blue”.
“Hoy el BCRA asistió con USD 140 millones al mercado. Es el equivalente a la demanda que hubo hoy para pago de energía”, indicó a Infobae una fuente de la plaza cambiaria.
“El pago de importaciones de energía y combustible forzó ventas del BCRA”, resumió Gustavo Quintana, agente de PR Corredores de Cambio. “La demanda de divisas para atender pagos al exterior volvió a superar la oferta privada, exigiendo importantes intervenciones oficiales”, añadió.
Los analistas que participaron del relevamiento de Latin Focuscorrespondiente al mes de junio pronostican un dólar mayorista a $158,50 para finales de diciembre, en este caso, un $1,60 más que en la encuesta pasada, que ubicaba al tipo de cambio oficial en los 156,9 pesos. Hay que recordar que el dólar mayorista se acerca a los $123, lo que implica que debería subir de acá a fin de año casi 29 por ciento.
Mientras, el valor del dólar de los mecanismos financieros para inversores más sofisticados operó también en alza. El denominado dólar “contado con liquidación”, que consiste en comprar localmente con pesos argentinos acciones o bonos y revenderlos en dólares, opera con mínimas variantes y en zona de máximos de 239 pesos. Por su parte, el “dólar bolsa” o “dólar MEP” se pacta a 232 pesos.
Expertos financieros relacionan la mayor demanda de dólares a lasfuertes ventas registradas en las últimas semanas de títulos de deuda pública nominados en pesos, disparadas por una creciente desconfianza en la marcha de la economía local -signada por la elevada inflación, la escasez de divisas y los problemas de financiación, entre otros factores- y los altibajos en los mercados internacionales.