
Draghi renunció al cargo tras el rechazo de una de las fuerzas de la coalición oficialista, el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), a darle el “voto de confianza” en el legislativo. No votaron en contra, pero tampoco lo apoyaron.
Los senadores del M5S salieron de la Cámara alta para no votar la moción relativa a un decreto con ayudas por valor de 26.000 millones de euros para paliar los efectos de la inflación, retirando su apoyo al jefe del Gobierno, que a pesar de todo superó la moción de confianza con 172 votos a favor y 39 en contra. “Quiero anunciar que esta noche presentaré mi renuncia en manos del Presidente de la República”, planteó Draghi en una reunión de Gabinete, según el texto divulgado por la oficina del premier.
“El Presidente de la República, Sergio Mattarella, recibió en el Palacio del Quirinale al Presidente del Consejo de Ministros, Prof. Mario Draghi, quien renunció al gobierno que residía”, informó un comunicado de la presidencia italiana a las 20 horas locales. “El Presidente de la República no aceptó la renuncia e invitó al Presidente del Consejo a presentarse al Parlamento para realizar comunicaciones, a fin de que se haga un balance de la situación que se ha presentado a raíz de los resultados de la sesión celebrada en el Senado” , agregó el mensaje.
El Gobierno que encabezó Draghi hasta ayer-y aún encabeza formalmente- fue el número 67 en apenas 75 años de existencia de la República.
Pese al pedido moral de Mattarella, “la decisión está tomada”, dicen los colaboradores del primer ministro, que comparecerá en el Parlamento el miércoles para explicar la “razones profundas” que llevaron a una elección que parece definida. Primero está el viaje a Argelia. Después las comunicaciones en Parlamento, donde se espera que el Presidente del Consejo anuncie su renuncia y deberá volver al Quirinale -el palacio sede de la Presidencia- para dimitir formalmente, lo que ya fue bloqueando ayer.
Entonces, corresponderá a Mattarella decidir si otorgar un nuevo encargo o se cae en el escenario que cada hora que pasa parece más concreto, según los círculos parlamentarios, que es disolver las Cámaras y acudir a elecciones anticipadas.
Se habla de una conversación tensa, por momentos incluso ruda, entre Mattarella y Draghi. Pero, pese a su énfasis en el Palacio Chigi emerge otro tiempo para reflexionar y negociar. El Partido Demócrata piensa que con Draghi a la cabeza, puede reiniciarse el Gobierno. La trama política arde. Forza Italia parece apoyar la posibilidad de un gobierno incluso sin el Movimiento 5 Estrellas, sobre el cual, incluso en la lectura de la Liga (ultra derecha), recae toda la responsabilidad de la crisis del verano. Mientras, el canciller Luigi Di Maio advierte en la noche que “sin Draghi caeremos en la oscuridad”.
Fuente Ambito