Washington, 25 jul (EFE).- El Departamento de Justicia demandó este lunes a tres grandes procesadoras avícolas por compartir de forma “descarada” información sobre salarios y beneficios de trabajadores que suprimieron la competencia y ha perjudicado “a una generación” de estos empleados obligándolos a laborar en condiciones peligrosas.
La querella civil, iniciada en el tribunal federal del Distrito de Maryland, alega, asimismo que dos de las procesadoras de aves participaron en “prácticas engañosas” poniendo a los criadores de pollos a competir para determinar su compensación.
Las demandas, acompañadas por propuestas de arreglo, nombran a las firmas avícolas Cargill, Sandeson Farms y Wayne Farms, como también la firma de datos Webber, Meng, Sahl (WMS).
Doha Mekki, de la División Anti-Monopolio en el Departamento de Justicia, explicó que “mediante un descarado esquema para el intercambio de información sobre sueldos y beneficios, estas procesadoras de carnes de pollo suprimieron la competencia”.
Agregó que las empresas “han dañado a toda una generación de trabajadores en las plantas que encaran condiciones de trabajo exigentes y a veces peligrosas para ganarse la vida”.
Las propuestas de arreglo para acabar con la demanda, dijo Andy Green, del Departamento de Agricultura, “presentan reformas significativas, incluido el fin de uno de sus aspectos más problemáticos en torno a los precios básicos engañosos”.
Si las propuestas de arreglo son aceptadas por los tribunales, la firma WMS tendrá prohibido la provisión de encuestas o cualquier otro servicio que facilite el intercambio de información competitiva en cualquier industria.
Asimismo el arreglo prohibiría que Cargill, Sanderson Farms y Wayne Farms intercambien información sobre las compensaciones que reciben los trabajadores en sus plantas.
Éstas y otras condiciones del arreglo propuesto por el Departamento de Justicia quedarían en vigencia por 10 años a partir de la fecha en que los tribunales lo aprueben.
Un acuerdo adicional con Sanderson Farms y Wayne Farms pondría fin al llamado “sistema de torneo” que ajusta los pagos básicos a los criadores de pollos sobre la base de cuán bien cada uno de ellos se desempeñe en relación con otros criadores.
Fuente El Mundo USA