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LA HABANA, Cuba. – Desde el centro penitenciario de máximo rigor Kilo 5 1⁄2, ubicado en la Carretera Central, en la provincia de Pinar del Río, el manifestante del 11J, activista y preso político Alexander Díaz Rodríguez denuncia que las autoridades penitenciarias no le han permitido visitas desde que fue trasladado a esa prisión.
Además, asegura que ni siquiera han aceptado que reciba las vituallas más elementales que se necesitan en prisión, como los artículos de aseo o los depósitos para recoger agua.
El activista, quien se encuentra actualmente en el área 1, destacamento 1, denuncia además que tampoco le han permitido recibir los medicamentos que necesita.
Ya durante su encierro en Guanajay, Díaz Rodríguez fue examinado por un oncólogo especialista en Endocrinología en el hospital general de San Antonio de los Baños, quien advirtió al jefe de la prisión, así como a una enfermera y una doctora de la cárcel, que el manifestante tenía cáncer, por lo que se imponía ingresarlo urgentemente, así como administrarle una dieta reforzada a base de carne roja, leche, yogur y vegetales, algo que las autoridades carcelarias no han cumplido.
El activista agrega que todas las veces que ha pedido o reclamado al reeducador, el primer teniente Nivaldo, que lo lleven al puesto médico, el militar solo ha puesto excusas.
En cuanto a la comida, lamenta que la ración sea tan pequeña que “ni un niño de cinco años quedaría satisfecho”, y ejemplifica que el menú actual consiste básicamente en un “agua de tenca a la que llaman sopa” y un “aporreado con más espinas que pescado”.
Por otra parte, algunos reclusos destacan que el opositor ha perdido mucho peso, se siente decaído y solo puede caminar con dificultad, por lo cual se pasa la mayor parte del día acostado.
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Fuente Cubanet.org
