
En una entrevista con la televisión de Brasil, el pescador explicó que tuvo la idea de meterse en el congelador después de ver que su bote comenzaba a hundirse.
El hombre había salido del puerto de Oiapoque, en el estado brasileño de Amapá, para pasar tres días de pesca. Su bote, sin embargo, tenía grietas y el agua comenzó a entrar y al día siguiente se hundió, explicó el pescador, que no sabe nadar.
Lo único que le quedó fue un congelador, y luego de probar si el objeto flotaba, decidió usarlo como bote.
Fuente Ambito